La Súper Card “podría obligar a las tarjetas de crédito a bajar los intereses de financiación”
Lo destacó Fernando Blanco Muiño, presidente de la Unión de Consumidores de la Argentina, quien consideró que el nuevo plástico "podría ayudar a bajar la inflación, pero no será suficiente si no se frena la emisión monetaria y se controla el déficit fiscal".
Almacenes y supermercados chinos también quieren la Súper Card. Referentes del sector manifestaron que la tarjeta para el consumo en hipermercados “podría ayudar a mantener la competitividad en los precios si se implementa en pequeños comercios”.
En este sentido, Yolanda Durán, presidenta de la principal cámara de los comerciantes chinos, se quejó por Continental por las comisiones que cobran los bancos.
También por Continental, María Lucila “Pimpi” Colombo, subsecretaria de Defensa del Consumidor, explicó que, “una vez aplicada la tarjeta Súper Card, se podrán ajustar los costos de producción de ciertos productos” al “achicar los valores de comisión que aplicará la iniciativa oficial”.
En cambio, el sindicalista opositor Hugo Moyano consideró que la Súper Card “no garantiza ningún éxito ni alivio para el consumidor”. Según el dirigente camionero, “se trata de un negocio para los supermercados”.
El representante de Consumidores Libres, Héctor Polino, consideró que, “si se modifican las comisiones que cobran las tarjetas, el Ejecutivo debería presentar un proyecto en el Congreso”.
Siempre por Continental, el presidente de la Unión de Consumidores de Argentina, Fernando Blanco Muiño, destacó por Continental que la Súper Card “podría obligar a las tarjetas de crédito a bajar los intereses de financiación”.
En Magdalena Tempranísimo, advirtió que, con el lanzamiento de la nueva tarjeta, “desaparecerán las emitidas por las cadenas de supermercados, pero seguirán vigentes los plásticos tradicionales”.
Asimismo, consideró que la Súper Card “podría ayudar a bajar la inflación, pero no será suficiente si no se frena la emisión monetaria y se controla el déficit fiscal”.