Una movilización encabezada por trabajadores jubilados y acompañada por partidos de izquierda derivó en incidentes frente al Congreso. Fue cuando efectivos de la policía de la Ciudad de Buenos Aires junto a otras fuerzas intentaron ordenar la movilización a fin de que no interrumpiera la circulación de vehículos, como establece el denominado protocolo antipiquetes que impuso el ministerio de Seguridad de la Nación, a cargo de la ministra Patricia Bullrich.