"Van a tener que ponerle otro título mediático porque cepo cambiario no va", dijo Cristina Fernández
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner rechazó el término "cepo cambiario" que determinados medios de comunicación emplean para designar a medidas tomadas en torno al dólar.
Al tiempo que defendió las decisiones del gobierno para "cuidar las reservas" y dar por tierra con la "timba especulativa" impulsada por algunos sectores.
Cristina, al encabezar este mediodía un acto en Casa de Gobierno, también destacó el superávit comercial que al mes de agosto alcanza los 10.031 millones de dólares.
La Presidenta, tras subrayar que "van a tener que ponerle otro título mediático porque cepo no va", dijo que a mediados del año pasado comenzó a correr en el mercado "el rumor de que luego de las elecciones iba a haber una gran devaluación" a partir de un objetivo de "especulación netamente financiera".
"El cepo era un instrumento de tortura del siglo XIX que refleja la inmovilidad, que no hay movimiento, pero aquí cepo no va", remarcó Cristina.
En oposición a esa "falta de movimiento" que representa la figura del "cepo", la Presidenta detalló que desde enero hasta la fecha "han egresado del país casi 80.000 millones de dólares", de los cuales "casi 48.000 millones dólares fueron para pagar importaciones", mientras que en concepto de deuda se abonaron algo más de 11.000 millones de dólares.
A lo que agregó que por turismo y pasajes de argentinos al exterior, la cifra en dólares trepa a 5.457 millones de dólares, lo que demuestra que "un montón de argentinos pudieron viajar al exterior (...) con una libertad absoluta".
"Creo que hay que encontrar otro título, ningún economista serio puede hablar de cepo. No tiene nada que ver con la realidad", subrayó la jefa del Estado.
Cristina señaló que frente a la actual crisis internacional, "todos los gobiernos comienzan a tomar medidas para cuidar sus reservas, para reducir la vulnerabilidad con un colchón de reservas que nos permita cierto grado de tranquilidad".
Dijo que la "timba cambiaria" comenzó a ponerse de manifiesto en el inicio del período electoral del año pasado, a lo que agregó que desde el Gobierno "tal vez cometimos el error de no hablar con números claros y concretos de lo que pasó en Argentina".
"Uno no le anda explicando a todo el mundo, toma medidas en la creencia que actores económicos van a actuar con cierto grado de racionalidad, pero no sucedió", agregó la jefa del Estado.
En lo que respecta al comercio internacional, Cristina señaló que "al mes de agosto, llevamos 10.031 millones de dólares de superávit de balanza comercial, lo que significa un 38 por ciento más de lo que llevábamos el año pasado a esta misma altura".
La Presidenta destacó que la medición de agosto con igual mes de 2011, marcó un crecimiento de "104 por ciento".
Con estos números Cristina salió a retrucar a quienes "pronosticaban una balanza comercial pobre" para el país durante el corriente año, en un marco en el que a nivel mundial "se caen las exportaciones y las importaciones".
"Debemos decir que hay un muy buen desempeño de nuestra administración de comercio", subrayó la Presidenta.
Cristina dijo que "los países centrales nos quieren transferir la crisis" y puso de manifiesto el rol activo puesto en marcha tanto por Argentina como por Brasil de implementar "todas las medidas necesarias para que eso no suceda" y poder "seguir sosteniendo la rueda de la actividad económica".