Nicolás Alcalá, vecino del barrio San Justo, de Salta, ató a dos delincuentes a postes de luz después de sufrir un robo en su almacén. Según denunció, un grupo de al menos nueve delincuentes fue responsable del hecho.

Al perro le dieron de comer palomas para que no los ataque, rompieron el portón, se sentaron en mi mesa, tomaron cerveza y revisaron cada pieza”, relató Nicolás. En la habitación de su hijo, los ladrones se llevaron dinero de una rifa para un viaje, estimando una pérdida de dos millones de pesos.