En los últimos días se ha observado un incremento del 20% en el precio del kilo de pan, en un contexto de aumento de costos, elevada inflación y disminución en el consumo. 

Desde los centros de panaderos fundamentan los últimos aumentos en los tarifazos de los servicios públicos: el gas aumentó mil por ciento para estos comercios, la energía eléctrica en torno a un seiscientos por ciento, y las materias primas decuplicaron en algunos casos sus precios desde diciembre. Además, el sector ha tenido que afrontar paritarias.