Capitanich: "No es delito concurrir a la Casa Rosada"
"Pretender asociar" este tipo de situaciones "a un plan de encubrimiento es una falacia argumental que no tiene asidero", objetó el jefe de Gabinete sobre las escuchas a D'Elía.
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, subrayó que "no es delito concurrir a la Casa Rosada", al ser consultado sobre la difusión de una escucha telefónica de Luis D'Elía en el marco de la investigación que llevaba adelante el fallecido fiscal especial de la causa AMIA, Alberto Nisman, donde el dirigente dice estar hablando desde Casa de Gobierno con el secretario general de la mezquita At-Tauhid, Jorge Alejandro Khalil, mencionado en la pesquisa por el atentado. Para Capitanich, "pretender asociar" ese tipo de situaciones "a un plan de encubrimiento (del atentado terrorista), es una falacia argumental que no tiene asidero".
En otro orden, justificó la publicación de un billete aéreo a nombre del periodista Hernán Patcher, quien dio la primicia de la muerte del fiscal Alberto Nisman, al señalar que el reportero dijo que "se sentía amenazado" y el medio para el que trabajaba había difundido un comunicado dando cuenta de que el viernes no había asistido a cumplir sus tareas. Patcher "se sentía amenazado, no se sabe su paradero, no hay notificación a la empresa que pertenece y entonces es muy importante publicar la información para que exista conocimiento público respecto de su paradero", argumentó.
Asimismo, ratificó que "en la República (Argentina) hay plena seguridad para que todos los periodistas puedan desempeñar sus funciones en el marco de la libertad de expresión", y dijo que si existen evidencias de que Patcher estaba siendo perseguido, las mismas deben publicarse.
Finalmente, Capitanich motejó de "bajeza típica" la crítica de la diputada nacional Patricia Bullrich al documento difundido la semana pasada por el Consejo Nacional del Partido Justicialista (PJ) tras la muerte del fiscal especial de la causa AMIA, Alberto Nisman. La diputada arrimada al macrismo acusó al PJ de usar "el lenguaje de la Triple A".