Ceferino Reato: “Él vivía congelado en el pasado, convencido de que había cumplido una misión”
El escritor y periodista fue el único que logró entrevistar al ex dictador fallecido. Lo que iba a ser un capítulo terminó siendo un libro entero, recordó.
Ceferino Reato fue el único periodista que logró entrevistar al fallecido Jorge Rafael Videla. “Es una muerte natural, estaba muy bien de salud y siempre hizo alarde de esto. Pero tenía ya 87 años”, destacó.
“Lo conocí de casualidad, fui a Campo de Mayo en 2011 para entrevistar a varios represores presos. Me presenté cuando lo vi y para mi sorpresa me dio una entrevista. Lo vi varias veces, hasta marzo de 2012”, recordó el periodista y escritor.
“Lo que en principio iba a ser el capítulo de un libro terminó siendo un libro en sí mismo”, detalló.
“Él vivía congelado en el pasado, donde se veía como un militar victorioso en lo que él llamaba guerra contra la subversión, extremadamente católico. No tenía arrepentimiento de nada y siempre decía que dormía muy tranquilo todas las noches, convencido que él había cumplido una misión”, aseguró el escritor.
“Tomó cada vez mayor poder político y en el ’76 dio un golpe muy anunciado que tuvo apoyo de sectores empresariales y sindicales”, destacó.
“Los empresarios le habían pedido una represión mayor a la que fue”, recordó Reato.
“No podían llevar a la justicia a los acusados, según él, porque había miedo en ese poder; no los podían fusilar por la experiencia chilena y en tercer punto, las cosas en Estados Unidos habían cambiado rotundamente”, señaló Reato, al recordar las palabras de Videla, al justificar su accionar. ‘Tuvimos que idear un método cruel pero lo único que podíamos hacer: la desaparición de personas’, le dijo Videla a Reato, autor de Disposición Final.
Videla “odiaba a Massera fuertemente, lo culpaba del fracaso de la dictadura. Había un consenso muy grande entre ellos hasta que la dictadura terminó con la guerrilla y empezaron las grietas para ver quién se convertía en el heredero de todo lo que quedaba. Massera se vendía como ‘el gran macho’ argentino y Videla se mostraba como un ‘moderado’. Fue un choque muy fuerte que, según Videla, fue el principio del fin de la dictadura”.
“Siempre fue elíptico pero sabía cuál era la cifra…él hablaba de 7 u 8 mil” desaparecidos, dijo el escritor.
“Debe haber dejado algo escrito…pero lo veremos en los próximos meses”, remarcó.