El titular del Banco Nación, Juan Ignacio Forlón, y el secretario de Justicia, Julián Álvarez, dos funcionarios cercanos a La Cámpora, dejaron sus cargos y pasaron a ocupar de manera exprés un lugar en la Auditoría General de la Nación.
 
La designación fue aprobada en la Cámara de Diputados, pese a que el tema no estaba en la orden del día, lo que provocó fuertes críticas de la oposición. En ese sentido, el kirchnerismo logró imponer su mayoría y, con 128 votos a favor, 54 negativos y 24 abstenciones, consiguió que Forlón y Álvarez no sólo sean promovidos como nuevos auditores, sino que también juraron hoy mismo en medio de un escándalo en el recinto.