Condenan a una mujer a pagarle $ 13 millones a su marido por 'escracharlo' en redes sociales
La Justicia pudo acceder al celular de la mujer, donde se encontraron pruebas de que ella era responsable de múltiples perfiles que difamaban a su exmarido. Esto, sumado a evidencias recopiladas por la víctima, llevó al juez a dictar la condena.
Una mujer fue condenada a pagarle a su exmarido casi 13 millones de pesos en concepto de resarcimiento por difamarlo en redes sociales, según un fallo de la Justicia de Control y Garantías de La Banda, Santiago del Estero. La sentencia, emitida en una audiencia reciente, fue resultado de una investigación de tres años que reveló que la mujer lo hostigaba utilizando perfiles falsos en plataformas digitales.
El caso, calificado por el abogado de la querella como una "odisea judicial", involucraba disputas relacionadas con el cuidado de los hijos de la pareja. La situación se originó cuando la mujer, insatisfecha con la separación, comenzó a difamar a su exmarido en redes sociales. Tras enviar una carta documento que no obtuvo respuesta, se inició una denuncia por calumnias e injurias.
La calumnia implica la falsa imputación de un delito, mientras que la injuria afecta la reputación y el honor de la persona agraviada. La Justicia pudo acceder al celular de la mujer, donde se encontraron pruebas de que ella era responsable de múltiples perfiles que difamaban a su exmarido. Esto, sumado a evidencias recopiladas por la víctima, llevó al juez a dictar la condena.
El resarcimiento de 12.800.000 pesos fue establecido por daños y perjuicios, además del cese de las publicaciones difamatorias. Aunque no se puede obligar a alguien a dejar de difamar si no lo desea, sí se puede exigir una compensación por el daño moral ocasionado al honor, buen nombre y dignidad de la persona afectada, según explicó el abogado de la querella.
El fallo destaca que independientemente de la veracidad de las acusaciones, no se puede menoscabar el honor en ninguna circunstancia, ya que se trata de un derecho personalísimo que debe ser protegido. El exmarido, dedicado al rubro comercial, sufrió la pérdida de clientes y dinero debido a las difamaciones constantes de su exmujer.