El Gobierno saldrá al rescate de Pescarmona
La ministra Débora Giorgi dijo que tratarán de preservar los 1.700 puestos de trabajo.
Luego de declararse en cesación de pagos, la empresa IMPSA, del Grupo Pescarmona, podría ser rescatada por el Gobierno para evitar que se acerque a un escenario de quiebra.
La ministra de Industria, Débora Giorgi, adelantó que el rescate se dará “en tanto y en cuanto se preserven los intereses del Estado y los 1.700 puestos de trabajo” que la firma tiene en la Argentina.
Precisó la funcionaria que con el ministro de Economía, Axel Kicillof, y otras áreas de la administración central, están trabajando “codo a codo” desde hace tiempo con la empresa de Pescarmona para evitar su bancarrota.
“Estuvimos trabajando y vamos a tratar de ayudar, como hacemos siempre, a las empresas para mantener sus puestos de trabajo y su calidad productiva. Pero también siendo la defensa de los intereses del Estado en el aporte que haga, siendo par de los otros posibles acreedores que pueda tener la empresa”, indicó.
Señaló Giorgi que IMPSA -que ya avisó que hoy no podrá hacer frente a un vencimiento- tiene problemas financieros ya hace 2 años, desde antes de que Argentina entrara en default.
La empresa no podrá hacer frente a un pago de intereses previsto para ese día por 42 millones de pesos y 23 millones de dólares.
En un escrito ante la Comisión Nacional de Valores (CNV), la compañía sostuvo que “se ve en la necesidad de posponer el pago de intereses” de sus “Obligaciones Negociables Clase X y de sus Obligaciones Negociables Clase XI”.
La metalúrgica de Pescarmona, la mayor proveedora argentina de soluciones para generación eléctrica a partir de recursos renovables, se convirtió en la primera empresa en declarar su incumplimiento en los pagos de sus obligaciones tras el default técnico en que ingresó Argentina el 30 de julio.
IMPSA aclaró que esta postergación obedece a su “situación financiera y como consecuencia de los atrasos sufridos en las cobranzas a algunos clientes en contratos significativos, sin perjuicio de continuar con las gestiones para revertir esta situación”.
“La sociedad se encuentra evaluando su situación operacional, comercial y financiera, y elaborando un plan que tenga en cuenta sus posibilidades financieras y brinde sustentabilidad a su negocio”, subrayó.
La firma tiene 3.500 empleados en el país y es proveedora de diversas industrias, como petróleo y gas, química y fertilizantes.