Durante la tarde, se llevaron a cabo manifestaciones de jubilados frente al Congreso de la Nación Argentina, las cuales estuvieron marcadas por forcejeos y enfrentamientos con las fuerzas policiales. Se implementó un amplio operativo de seguridad en las intersecciones de Combate de los Pozos e Hipólito Yrigoyen, con el objetivo de despejar las calles afectadas por la movilización.

La movilización comenzó alrededor de las 15 horas, con la presencia de banderas y carteles que expresaban el descontento de los manifestantes ante la política de ajuste del Gobierno. En respuesta a esta situación, y en el marco del protocolo antipiquetes, se formó un cordón policial para contener a los manifestantes y evitar interrupciones en el tránsito.

Como consecuencia de la protesta, el flujo vehicular en el centro de la ciudad se vio considerablemente afectado. En la intersección de Entre Ríos y Avenida Rivadavia, solo un carril se mantuvo habilitado para el tránsito, lo que generó un importante congestionamiento en la zona.

Ante la presencia del doble cordón policial, un grupo de jubilados optó por sentarse en medio de la calle como una forma de visibilizar su reclamo. Un participante de la manifestación expresó a los medios de comunicación su descontento con la actuación policial, señalando que se siente agredido y que se les impide transitar libremente, tanto por la vereda como por la calle, en virtud de su exigencia de un salario digno.

Este manifestante, quien ha estado participando de estas movilizaciones durante el último mes, comentó que ha notado un creciente interés y participación en las marchas que se realizan los miércoles frente al Parlamento. “Cada vez tengo más ganas de venir, invito a más gente y somos cada vez más”, afirmó a los periodistas presentes.