En medio del conflicto con Camioneros, que provocó que la Ciudad amaneciera llena de basura, el Gobierno porteño decidió dar por terminado el proceso de licitación del sistema de grúas de acarreo y anunció que seguirá operando el servicio. 

El jefe de Gobierno Jorge Macri aseguró que era "insostenible" mantener el contrato en las condiciones en las que lo había dejado su antecesor, Horacio Rodríguez Larreta.