La Cancillería respondió las quejas por las trabas a la importación
El gobierno defendió sus políticas al respeto, tras los cuestionamientos de 40 naciones. Siguen levantando barreras comerciales artificiales, se difundió desde la sede diplomática que preside Héctor Timerman.
El gobierno argentina ratificó sus políticas comerciales ante la Organización Mundial de Comercio (OMC), tras las críticas recibidas por las trabas a las importaciones de parte de unas 40 naciones encabezadas por la Unión Europea y Estados Unidos.
Según versa el comunicado diplomático argentino, en la reunión ordinaria del Comité de Mercancías de la OMC “se trataron algunos aspectos del comercio exterior de la Argentina”.
“Llama la atención que la iniciativa haya sido planteada por países que han aumentado sus exportaciones a la Argentina en un 25 por ciento, superando su nivel de exportaciones promedio al resto del mundo y en un año en el cual la Argentina fue el país que más aumentó sus importaciones entre los miembros del G20, contribuyendo de esta forma a la recuperación económica de los países en crisis económica y financiera”, se quejó la delegación argentina.
Cancillería también consideró “llamativo que ninguno de los países participantes en la sesión del Comité de Mercancías hay presentado un caso puntual en el cual la Argentina haya incumplido las reglas de la Organización Mundial de Comercio y que los firmantes basan sus reclamos en vagas versiones publicadas por la prensa local”.
Incluso, según Cancillería, en el comunicado de los países desarrollados se sostiene: “No estamos informados de ninguna directiva o resolución oficial que establezca este balance comercial o requerimiento de inversión, sin embargo funcionarios del gobierno argentino de alto nivel han sido citados en la prensa argentina diciendo claramente que el propósito es la mejora del balance comercial a través de las importaciones y promoción de las exportaciones”.
Cancillería dijo que la Argentina “ve con alarma la insistencia de los países que siguen levantando barreras comerciales artificiales para dificultar el ingreso de la productos agroindustriales de los países en desarrollo al tiempo que ejercen presiones políticas para obligar a estos países a recibir la producción de bienes que sus mercados domésticos no pueden absorber por la situación económica que atraviesan desde el 2008 y que son las verdaderas trabas para la construcción de un sistema económico multilateral más equilibrado”.
En ese sentido, Argentina reiteró que “seguirá ejerciendo la decisión soberana de sus políticas comerciales que han impulsado con las normativas de la Organización Mundial del Comercio pero rechazando cualquier tipo de injerencia interna”.
La cancillería de nuestro país destacó que “importantes socios comerciales de la Argentina, como los países del Mercosur, la gran mayoría de los países latinoamericanos, China, Rusia e India no suscribieron esta declaración”.