El reciente anuncio del veto al presupuesto universitario por parte del presidente Javier Milei ha llevado a la Confederación Nacional de Docentes Universitarios (CONADU) a convocar un paro nacional que se llevará a cabo el jueves 25 y viernes 26 de septiembre. Además, se ha programado una marcha nacional universitaria para el 2 de octubre. La federación informa que los docentes han experimentado una disminución del poder adquisitivo de aproximadamente el 75% desde diciembre del año pasado.

Para visibilizar la crisis en el sector, se han organizado jornadas de protesta los próximos lunes, martes y miércoles. Esta iniciativa se suma a las acciones ya anunciadas por la Federación Argentina de Trabajadores de Universidades Nacionales (FATUN) y los sindicatos de docentes de la Universidad de Buenos Aires (UBA), quienes también han convocado a un paro para el 26 de septiembre. Se anticipa la adhesión de otros gremios de la comunidad universitaria a estas medidas de fuerza.

Pablo Perazzi, secretario general del Sindicato de Docentes de la UBA (FEDUBA) y uno de los representantes de la CONADU, expresó su preocupación por el posible incumplimiento de leyes nacionales que garantizan el financiamiento de la educación superior, así como de la ciencia y la tecnología. Este aspecto es fundamental para asegurar la calidad y el acceso a la educación en el país, resaltó.

Perazzi subrayó su inquietud ante lo que considera un intento de engañar a la ciudadanía al sostener que un país puede desarrollarse minimizando la formación de profesionales y científicos universitarios. “Parece existir una percepción errónea por parte del Gobierno, que asocia la formación de médicos, ingenieros, científicos sociales y programadores con la denominada 'casta' o con un gasto fiscal que no es sostenible”. Esta desconexión con la realidad, según el dirigente, es motivo de preocupación y debe ser abordada con seriedad.