La presidenta recomendó impulsar políticas que apunten al “consumo” para paliar la crisis
Se manifestó así durante el cierre de las Jornadas Monetarias y Bancarias 2011, que organiza el Banco Central. Además, pidió a los bancos prestarles más a la producción y consideró que los planes de ajuste son como un remedio que mata al enfermo.
La presidenta Cristina Fernández cerró las Jornadas Monetarias y Bancarias 2011, organizadas por el Banco Central. En ese marco, advirtió que la mala distribución del ingreso fue una de las razones de la crisis global por lo que recomendó a los economistas “salir de los esquemas tradicionales” y poner en práctica recetas que apunten “al consumo” como hizo Argentina a partir de 2003.
“La desigualdad es una tragedia social y un valor económico”, señaló la jefa de Estado.
En su mensaje, que se extendió por alrededor de 40 minutos, la mandataria argentina se refirió a la situación difícil que enfrentan algunos países y aseguró que los programas de ajuste, como se aplican hoy en Grecia otras naciones europeas, están demorando un desenlace inevitable y que, después de la experiencia de la Argentina, son como un “remedio que está matando al enfermo”.
Durante su intervención, la presidenta estuvo acompañada por los ministros de Economía, Amado Boudou; y de Industria, Débora Giorgi; por el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli; y por la presidenta del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont.
En otro orden, Fernández instó a la banca a “aumentar el nivel de financiamiento” para la producción.