El Gobierno argentino ha establecido un plazo límite para que el 20% de los hogares de bajos recursos, pertenecientes al segmento N2 de los servicios de gas y energía eléctrica, reconfirme su condición en el Registro de Acceso a los Subsidios Energéticos (RASE). Aquellos que no realicen este trámite perderán los subsidios en sus boletas actuales y serán automáticamente reclasificados en el nivel N1, lo que resultará en un aumento significativo en sus tarifas de servicios, que podrían incrementarse entre un 176% y un 257%.