Los industriales advirtieron que un aumento salarial del 30% es "inviable"
Lo afirmó Daniel Funes de Rioja, representante de la Coordinadora de Industrias de Productos Alimenticios. Las patronales persiguen una suba del 20% y la posibilidad de discutir a fines de 2013 un premio no remunerativo.
El lunes, la Confederación de Asociaciones Sindicales de las Industrias Alimenticias (CASIA) anunció que reclamará una recomposición salarial del 30 por ciento en las discusiones paritarias del sector, que arrancarán en marzo. Al día siguiente, Hugo Moyano afirmó que ese mismo porcentaje será el piso de sus negociaciones salariales.
Tras los anuncios gremiales, rápidamente algunos empresarios salieron a manifestar su opinión, y uno de los más categóricos fue Daniel Funes de Rioja, en su calidad de representante de Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (COPAL), la contracara de CASIA.
Para Funes de Rioja, una suba del 30 por ciento es "inviable". Su sector propondrá, en cambio, un aumento no superior al 20 por ciento y la posibilidad eventual de discutir a fin de año, y sólo si 2013 termina siendo un buen ejercicio, algún premio no remunerativo, publica el diario Ámbito Financiero.
"Que no haya una competencia entre gremios por ver quién tiene el aumento salarial más importante", pidió públicamente el representante de las empresas de alimentos, para quien las paritarias de este año están condicionadas por las internas entre las dos CGT y las dos CTA.
Según Moyano, sólo con un aumento del 30 por ciento se podrá equilibrar el 20% de alza en el mínimo no imponible de Ganancias, y la inflación real del 25% registrada el año pasado para que el poder adquisitivo de los choferes no pierda capacidad de compra.
En la misma posición se encuentran otros gremios, como los petroleros, mineros, automotrices, metalúrgicos de grandes compañías, bancarios, telefónicos y la mayoría de los operarios de servicios.
Los alimentarios, que arrancarán sus negociaciones en marzo, irán a las reuniones con sus propios números para fundamentar sus reclamos: afirman que los precios aumentaron el año pasado un 27,56% y que la canasta básica llegó en diciembre a los 7.967 pesos mensuales. Para el INDEC, ese dato es de 1.600 pesos.