Actualidad
No importa que resuelva, la Corte debe dar la cara
Es la Corte Suprema de Justicia, la cabeza de uno de los tres poderes del Estado. El juego de las escondidas, que juega siempre, no es aceptable en este caso. Por Horacio Minotti.
A la Corte le gusta jugar a esconderse. Le da un halo de misterio, de superioridad. Quien no deja ver sus intenciones, maniobra con el poder de la incertidumbre. Suele hacerlo. También el hecho de que el Alto Tribunal no tiene plazos para expedirse, es una herramienta que suele usar para que las cosas se resuelvan solas, cuando por cuestiones políticas no quiere o teme resolver determinada cuestión.
Recomendado para vos