Para De Mendiguren, el camino es “cambiar la matriz productiva de la Argentina”
Bravo.Continental / El secretario de la UIA aseguró que “acá hay una oportunidad concreta y objetiva, pero atrás tenemos una historia que deberíamos no repetir”. En ese sentido, explicó que “el salto al desarrollo, a diferencia del crecimiento, no es espontáneo: son claves los consensos” e hizo hincapié en “introducir las nuevas tecnologías y que no exportemos soja sino biocombustibles”.
“Argentina acaba de cumplir 200 años y queda mucho por hacer. Yo me pregunto cuál es el futuro de nuestro pasado, que fue caracterizado por el clima de confrontación: unitarios vs. federales, interior contra Capital; campo contra industria, grandes empresas vs. pequeñas... tuvimos períodos de crecimiento, pero no de desarrollo”, analizó el secretario de la Unión Industrial Argentina, José Ignacio de Mendiguren.
En el marco de la convocatoria a un Pacto Social que hizo la presidenta Cristina Fernández, desde la UIA instaron a la CGT a iniciar "una relación más madura". El titular del grupo que representa al sector empresarial, Héctor Méndez, afirmó horas atrás que "no todos los empresarios son buenos, pero hay muchas actitudes sindicales que son muy malas".
Para De Mendiguren, “Argentina asiste a la creación en el mundo de 1.000 millones de nuevos habitantes de clase media, que requieren lo que nosotros tenemos a precios que a niveles de 2002 lo superan en un 140 por ciento. Ante eso, nuestra actitud no debe ser tomar sólo como activos nuestros recursos naturales sino tener una estrategia consensuada para insertarnos en esa nueva oportunidad pero que nos permita ese salto al desarrollo”.
En ese sentido, advirtió que “el salto al desarrollo, a diferencia del crecimiento, no es espontáneo. Para esto, son clave los consensos, no repetir esa historia de eternas confrontaciones”.
“Campo-industria es un conflicto que tuvo Canadá, Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda, y lo resolvieron. Acá parece que cuando hablamos de distribución tenemos que ausentar la inversión”, lamentó De Mendiguren, para quien “acá hay una oportunidad concreta y objetiva, pero atrás tenemos una historia que deberíamos no repetir”
En esa línea, remarcó que el camino es “cambiar la matriz productiva de la Argentina. En el sector agropecuario, sólo el 25 por ciento de lo que se exporta tiene un valor agregado, en algunos casos mínimo”.
Cambiar la matriz productiva, “donde el salario vuelva a participar en forma permanente del 50 por ciento del ingreso nacional, es introducir las nuevas tecnología y que no exportemos soja sino biocombustibles”.
A futuro inmediato. “Aquel que quiera aspirar a un voto tendrá que darle a la gente una respuesta a esto: cómo vamos a integrar a Jujuy y terminar con una Capital Federal que tiene una renta per cápita de Bélgica y el interior la de África”, resaltó el empresario.