El paro nacional de los trabajadores del sector aceitero ha generado un debate significativo en el ámbito de la agroindustria en Argentina. Las empresas exportadoras de este sector han manifestado que la huelga carece de fundamento gremial, dado que se inició tras la decisión de los sindicalistas de abandonar las negociaciones paritarias en curso, en respuesta a los aumentos salariales propuestos que no fueron considerados satisfactorios.