Sin la presidenta, el acto oficial patrio fue presidido por Aníbal Fernández
El jefe de gabinete y candidato a gobernador bonaerense destacó la figura del Libertador San Martín y abogó por la integración regional de América del Sur.
El ministro de Defensa, Agustín Rossi, junto al jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, encabezaron este lunes la celebración por el 165° aniversario de la muerte del Libertador José de San Martín, con un discurso centrado en la "integración latinoamericana".
En un acto que se llevó a cabo en Tecnópolis, Rossi destacó que "San Martín expresa los valores que hoy tiene la política de Defensa de nuestro país", teniendo como "herencia" las "políticas de integración".
En tanto, el jefe de gabinete calificó al Libertador como "un cóndor", y consideró que "es bueno recordar a los cóndores en tiempos de buitres y chimangos", en alusión a los tenedores de bonos de deuda.
Por su parte, Rossi afirmó que San Martín "nos enseñó el camino de la integración", por lo que "vamos dejando atrás aquellas épocas donde parecía que las Fuerzas Armadas Latinoamericanas tenían problemas, para construir una fuerza importante en el conjunto de América del Sur".
"San Martín dijo que nunca iba a derramar sangre de hermanos. Ese ideario de San Martín está presente en la política de defensa que ha diseñado la Presidenta (Cristina Fernández) y nosotros tratamos de honrar permanentemente", enfatizó.
Asimismo, sostuvo que "lo mejor que tienen las Fuerzas Armadas Argentinas hoy son sus integrantes. El recurso humano que nunca debe olvidar el lugar de donde nació que es el pueblo argentino".
"Quienes tuvieron decisión y vocación de pertenecer a las Fuerzas Armadas, hoy encontraron un lugar desde donde servir a la patria, nosotros intentamos darles el lugar de aporte y ser partícipes de la construcción de nuestra Argentina", destacó.
El ministro de Defensa afirmó que en Argentina "hay lugar para los hombres y mujeres de las Fuerzas Argentinas", ya que "impulsan a seguir fortaleciendo la industria para la Defensa que sufrió un atrocinio en la década del 90".
"Pudimos recuperarla, sostenerla, llevarla adelante, consolidarla y ponerla de pie para que en los próximos años tenga un fuerte desarrollo", sentenció.
Por su parte, Fernández criticó a un sector de la historiografía argentina al destacar: "Pocas vidas como la suya han sido tan falseadas con propósitos inconfesos. Nos han mentido, nos han negado a este inmenso hombre". En ese sentido, ironizó que "los cráneos" del país intentaron mostrar al libertador como "un hombre sobrenatural eterno" porque era "todo lo que hubiesen querido ser. Un hombre respetado, un hombre del pueblo". Además, lo calificó como "un hombre de estado, un verdadero estadista" que no se "no se arrodillaba ante nadie para conseguir financiamiento, sino que se servía de lo que tenía a mano".
"La libertad era el objetivo. Las vanidades y el orgullo debían ser dejadas de lado", precisó.
Por último, recordó que "habiendo sido amenazado (San Martín) se exilió", y apuntó: "el poder económico siempre hace esas cosas con las personas que se oponen a su política".