Un alumno de sexto grado de la escuela N°67 "Juan Enrique Pestalozzi", ubicada en el barrio Echesortu de Rosario, fue mordido por una rata en el baño del colegio. Esto motivó la suspensión de clases para ambos turnos el día martes. El hecho ha generado protestas por parte de los padres, quienes han denunciado una invasión de roedores que se ha hecho evidente desde el inicio del ciclo lectivo.

El incidente tuvo lugar en una zona céntrica de la ciudad santafesina, específicamente sobre la calle Mendoza al 3800. Una madre de uno de los alumnos expresó su preocupación, señalando que el ataque del roedor era un resultado previsible debido a la situación denunciada previamente por los padres. Según su relato, el alumno se acercó a la rata pensando que estaba muerta, pero fue mordido en el dedo de la mano. Aunque recibió atención médica y se encuentra en buen estado, la madre enfatizó que la situación es insostenible.

Ante la gravedad del asunto, la escuela cerró sus puertas, y un cartel en la entrada informaba sobre la suspensión de clases por motivos de desratización y limpieza. Los padres, preocupados por las condiciones en las que se encuentran sus hijos, se congregaron en la puerta del establecimiento exigiendo soluciones efectivas para el problema de los roedores. Desde el Ministerio de Educación de Santa Fe se comunicó que se está trabajando en intervenciones para abordar la problemática.

Los padres han indicado que este problema no es nuevo y que desde el inicio del año escolar han encontrado heces y orina de ratas en el mobiliario del aula. Un padre, visiblemente frustrado, expresó que las medidas tomadas hasta el momento no han sido suficientes y subrayó la necesidad de un enfoque más contundente para erradicar la plaga, dado que el problema se ha agravado con el tiempo.

Se han implementado acciones como la colocación de barreras físicas y tareas de desinfección, aunque las autoridades escolares han indicado que no cuentan con la autorización necesaria para utilizar métodos más efectivos de exterminio, como el uso de cebos, que no están permitidos en el ámbito escolar sin la aprobación del Ministerio.