Victoria Montenegro definió como “milagrosa” la identificación de los restos de sus padres
El hallazgo de los restos óseos en Colonia derrumbó la versión del apropiador, dejando además de manifiestoque el aparato represivo fue montado sistemáticamente y previamente a marzo del 76, reflexionó la joven apropiada.
Victoria Montenegro, hija de desaparecidos y nieta recuperada por las Abuelas de Plaza de Mayo, calificó como "milagrosa" la identificación de los restos pertenecientes a su padre, Roque Montenegro, que se hallaban enterrados en carácter de NN en el cementerio de Colonia, Uruguay, desde mediados de 1976.
"La investigación del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) confirmó que mis padres estuvieron secuestrados durante varios meses y fueron víctimas de los vuelos de la muerte", destacó en La Mañana.
La nieta recuperada relató que sus padres y ella habían sido secuestrados en febrero de 1976 por un grupo de tareas, pero destacó que su apropiador, el coronel del Ejército Hernán Tetzlaff, le había contado que sus progenitores habían muerto en esa fecha durante un "enfrentamiento" en la localidad bonaerense de William Morris.
El hallazgo de los restos óseos de Roque Orlando Montenegro en el cementerio de Colonia dio por tierra con la versión relatada por el apropiador, quedando de manifiesto además que el aparato represivo fue montado sistemáticamente y en forma previa al 24 de marzo de 1976.
"En lo personal siento que no existe una palabra para definir tantos sentimientos. Por un lado, el dolor de conocer el destino final de mi papá y saber que tuvo que pasar por situaciones que creía ajenas a él, y por otro tener este sentimiento de paz que únicamente da la verdad", afirmó Montenegro con voz quebrada y lágrimas en sus ojos.
El cuerpo de Roque Orlando Montenegro fue encontrado en las costas uruguayas el 17 de mayo de 1976, y estuvo enterrado como NN junto a los restos de otras siete personas halladas en la misma condición.
A su turno el representante de la EAAF, Carlos Somigliana, relató que a partir de 2005 se hizo un primer intento y recién en marzo de 2001 se logró extraer el código genético necesario para ser comparado con el existente en el Banco Nacional de Datos Genéticos.
Montenegro, Carolotto y Somigliana coincidieron en destacar que aún quedan muchos cuerpos de desaparecidos sin identificar, como así también nietos apropiados y que no conocen su verdadera identidad.
"Quiero poner énfasis en que aquellos que tengan familiares desaparecidos aporten su sangre, porque van a poder cerrar esta historia, no con el olvido", sostuvo Carlotto que también hizo un llamado y convocatoria a aquellos jóvenes que tienen dudas sobre su identidad.
La referente de Abuelas también destacó que casos el de Victoria Montenegro demuestran que la identidad se refuerza desde las alegrías y los dolores: "Acá hay una mezcla, el dolor de una realidad de abrazar los restos de su papá, pero la alegría de poder hacerlo".