El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, expresó que el nuevo gobierno interino de Bariloche que encabeza María Eugenia Martini "contará con consensos suficientes para llevar adelante sin problemas la transición y elegir el nuevo intendente". Además, consideró que el intendente suspendido, Omar Goye, "debe permitir una transición ordenada lo antes posible".

Martini, presidenta del Concejo municipal de Bariloche , asumió ayer un interinato en reemplazo del intendente suspendido Omar Goye, quien además enfrenta el proceso de revocatoria del mando, basado en acusaciones de "ineptitud" para el cargo y numerosas irregularidades en el año de mandato que ejerció.

Weretilneck afirmó que Martini "contará con toda la predisposición, la colaboración y el acompañamiento que requiere del gobierno provincial, y diseñará un nuevo marco de alianzas, para estar a la altura de este desafío que enfrenta".

"Tiene experiencia en la función pública y está suficientemente preparada, conoce todos los problemas que enfrenta. Pero necesitará muchos acuerdos y consensos, esta transición debe apoyarse en eso y todos aquellos que quieran estar deben estar en el gobierno", dijo el gobernador en diálogo con la agencia Télam.

Agregó que en esos acuerdos debe estar "el gremio municipal SOYEM, todos los bloques, el Frente para la Victoria, todos, el gobierno municipal debe contar con la mayor cantidad de apoyos posible y evitar su aislamiento".

"Cuando uno como gobernante se aísla, los problemas son de uno y el resto mira. Pero cuando hay sustento democrático, todos ayudan y los problemas se resuelven", sostuvo en referencia a la frustrada gestión de Goye y también el incipiente gobierno de Martini.

Dijo que la suspensión de Goye "es un hecho no deseado y no querido por ningún dirigente político, porque se espera que la elección de un intendente permita llevar adelante el compromiso con la gente".

"Lo importante es que más allá de los motivos invocados en la revocatoria, eso se decidió con el voto de 10 concejales sobre 11 del cuerpo, y la ordenanza da lugar a la participación del pueblo en un referéndum, que con el 10 por ciento de las firmas (casi 8.000) decidirá si Goye continúa o no", señaló.

Destacó que además del proceso legal "hay que mirar la situación política, de Goye en una soledad absoluta, sin respaldo de la población. Nadie salió a apoyarlo, ni la gente, ni los gremios, ni las entidades tradicionales de Bariloche , y perdió el acompañamiento nacional y provincial".

Le pidió a Goye que renuncie, para evitar el desgaste que significa el proceso de revocatoria, y consideró que "seguir insistiendo en ser el intendente es una falta de sentido común, de ubicación".

"Debe permitir una transición ordenada lo antes posible. Con el referéndum vamos a llegar al invierno y tendremos un gran esfuerzo con el Plan Calor, el mantenimiento de calles y otras tareas de la contingencia. Pero si renuncia antes, permitirá la llegada de un nuevo intendente, en mejores condiciones de enfrentar eso", dijo.

Estimó que en estos dos meses "el gobierno de transición no resolverá todos los problemas, porque para empezar el municipio está prácticamente quebrado", pero resaltó que "sí podrá mostrar gestos y acciones distintas, una nueva forma de conducir que garantice la paz social".

"Mejorará la relación con los vecinos, mostrará un gobierno austero, otra forma de gobernar. Su imagen no será la de un intendente rodeado de personas con antecedentes delictivos y mostrará transparencia, sin conflictos permanentes", agregó. "Cuando el gobierno explica a dónde va, el pueblo lo acompaña y lo apoya", expresó el gobernador.