La reunión anual del Foro Económico Mundial fue inaugurada este martes en Davos, Suiza, con un novedoso mensaje del Papa, que pidió a la élite política y empresarial un esfuerza frente a la desigualdad.

 

Tras el tradicional discurso de bienvenida de Klaus Schwab, fundador del Foro Económico Mundial, el cardenal Peter Turkson leyó un discurso de Francisco, en el que éste advirtió que aunque la economía moderna ha logrado grandes avances en educación y sanidad, “a menudo ha llevado aparejada una amplia exclusión social”.