Nuestras Malvinas
Que nadie divida lo que Malvinas suma. En tiempos de tanta discusión y atomización de las opiniones la lucha por recuperar nuestra soberanía en las Islas Malvinas debe ser el punto de mayor unidad nacional.
Que nadie divida lo que Malvinas suma. En tiempos de tanta discusión y atomización de las opiniones la lucha por recuperar nuestra soberanía en las Islas Malvinas debe ser el punto de mayor unidad nacional. Eso tiene un valor. Es como un árbol que nos pertenece a todos los argentinos y entre todos tenemos que seguir cuidando y regando sus raíces.
Para empezar, la bandera nacional de Malvinas produjo el milagro de que la presidenta convocara a todos los partidos políticos y a todos los sectores sociales. Depuso su actitud beligerante y hasta sus broncas personales. La presidenta convocó a todos y todos concurrieron. Ayer planteamos que eso era lo correcto. Solo faltaron los senadores del radicalismo pero más porque el partido está en una profunda crisis interna que no le permite salir del pantano. Eso solo, que por lo menos hayan estado todos los sectores juntos una hora bajo el mismo techo sin pelearse es un avance. Porque hasta ahora entre el gobierno y la oposición solo hubo ladridos y acusaciones mutuas. Es apenas un primer paso. Tibio, me podrán decir. Es verdad pero para recorrer un kilómetro siempre hay que dar un primer paso. Ya está planificado un segundo paso muy bueno. Es que Cristina anunció que va a invitar a las autoridades de todos los partidos y a representes de América Latina a viajar juntos el 14 de junio al Comité de Descolonización.
Para que se vea claramente que Argentina no está sola y que no se trata de un tema de un solo partido. Corresponde denunciar esta intolerable, prepotente y colonial militarización de las islas por parte de los ingleses. Siempre nos quejamos porque se dejaba afuera de todo, porque se ninguneaba al resto de los partidos políticos. Si en este caso han sido convocados, bienvenido sea, entonces. Y que se repita, y que se multiplique. Siempre es buena la señal de que se puede convivir pacíficamente y dialogar. Los disensos y los consensos son parte fundacional de toda democracia. Una sociedad en donde solamente hay consensos es una dictadura del pensamiento único. Y una sociedad donde solamente hay disensos es un estado de anarquía y ausencia de cohesión nacional. Asi como criticamos con todas las letras las decisiones que nos parecen equivocadas, también tenemos que elogiar con todas las letras cuando nos parece que desde el gobierno se toman determinaciones correctas.
Y es absolutamente acertado denunciar a Inglaterra que está haciendo lo mismo que hizo la dictadura de Galtieri en nuestro país. Huir hacia delante, utilizar el sagrado tema Malvinas, para escapar o para ocultar las dificultades económicas que tienen fronteras adentro. Son un despropósito sus declaraciones altaneras y es una provocación guerrerista y soberbia el envío de un destructor de última generación con el principe vestido de militar a bordo.
Dijo bien la presidenta: se están por cumplir 180 años de la usurpación de nuestro territorio. ¿Hasta cuando la comunidad internacional va a tolerar semejante humillación? ¿Cuál es el derecho que le asiste a Inglaterra para seguir teniendo una actitud colonialista y anacrónica? ¿Es la ley del más fuerte? ¿Por tener una silla en el Consejo de Seguridad se siente con el derecho de poner en riesgo la paz y los recursos naturales de los argentinos? Solo tengo un reproche o una crítica a la presidenta. Tiene que ver con la sobreactuación o con la desproporción entre la expectativa generada y el anuncio concreto. Nos preparamos para un anuncio que iba a conmover al mundo y se hizo un sensato planteo que compartimos todos. Son los problemas que aparecen cuando se piensa todo en términos de potenciar la comunicación al máximo.
Eso hace aparecer a Cristina siempre envuelta en la bandera de la épica y la actitud heroica. No eran necesarios tantos bombos ni platillos. Fueron excesivas las marquesinas. Pero la decisión que tomó la presidenta es correcta, valiosa, sensata y debe ser apoyada por todos. Fue positivo que la presidenta colocara los conceptos de Memoria, Verdad y Justicia también en este tema y le sumara los valores de la democracia y la soberanía. No se puede culpar a un pueblo por la decisión de un gobierno que fue terrorista de estado. Porque somos un pueblo de paz. No nos gustan los juegos de guerra. Nuestro pueblo ya sufrió demasiado la muerte y el horror.
Firmeza y racionalidad deben ser los pilares de este tema.
Todos juntos para que nadie quiera sacar provecho mezquino de un tema nacional. Porque los muertos son nuestros. Y porque las Malvinas, también son nuestras.