Del Potro aprovechó al máximo en el primer set el enorme cansancio que arrastra Cilic tras jugar más de diez horas entre viernes y sábado y con un tenis muy sólido apabulló a su rival.

El tandilense le quebró el saque a Cilic las tres veces que le tocó servir al croata y no ganó el primer set por 6-0 porque cedió su saque en el sexto juego.

En el segundo set, Cilic trató de jugar un poco más agresivo pero se encontró con un Del Potro muy firme, que no le dejó ningún resquicio para que se pueda recuperar.

El argentino le quebró el saque en el cuarto juego, se adelantó 3-1 y a partir de ese momento fue dueño absoluto del parcial, que finalmente ganó por 6-2.

Argentina tomó ayer una ventaja de 2-1 con la victoria de David Nalbandian y Eduardo Schwank sobre Marin Cilic e Ivo Karlovic por 3-6, 7-6 (8-6), 6-3, 6-7 (6-8) y 8-6, en un extenso partido de dobles que duró 4 horas y 59 minutos.

La alegría argentina quedó inmortalizada en el abrazo de todo el equipo argentino, que ya piensa en otra semifinal de Copa Davis (ante República Checa, del 14 al 16 de septiembre, en Parque Roca), la novena desde el regreso al grupo mundial, en 2001.