El tandilense cosechó una contundente reprobación, matizada por algunos tibios aplausos, cuando se marchaba del court del estadio Mary Terán de Weiss, luego de la decisiva derrota de Carlos Berlocq -su reemplazante- ante Tomas Berdych, primera raqueta del equipo europeo.


Del Potro, que ayer se bajó de la serie por una molestia que arrastra en su muñeca izquierda, dejó el estadio con un gesto adusto, acaso provocado por la conciencia del repudio que generó su carencia de espíritu colectivo durante toda la serie con los checos.


En la última jornada de competencia y por primera vez en el fin de semana, la "Torre de Tandil" siguió el partido de Berlocq sentado junto al resto del equipo capitaneado por Martín Jaite, con quien profundizó diferencias por su manejo individual en la previa.