F1: una vuelta a bordo del callejero de Miami, con Checo' Pérez
Las obras están completadas "a un 95%". El segundo Gran Premio estadounidense del calendario de la F1 tendrá un trazado vertiginoso, en el estilo de Jeddah y Bakú.
Del 6 al 8 de mayo se disputará el GP de Miami de F1, y los aprestos para el rápido circuito callejero en torno al Hard Rock Stadium están casi completos. Richard Cregan, máximo responsable de la organización, asegura que todo está listo “Al 95%. Estamos muy felices con el progreso realizado y hay que atribuirles un gran mérito al equipo de trabajo que tenemos aquí. Hemos buscado una pista que enamore a los pilotos y que ofrezca grandes experiencias a los aficionados”.
Después de casi tres años de trabajo y doce meses de construcción, las obras llegaron prácticamente a término en febrero (lo cual es muy importante para que el asfalto no rezume aceite con consecuencias disparatadas e inseguras como en el primer GP de Turquía durante la pandemia). Ahora sólo resta 'armar' pianitos, guardrails y boxes.
El trazado tiene 5,41 kilómetros de longitud (un típico Circuito Tilke de 57 vueltas), con diecinueve curvas y tres rectas largas (una de ellas, de más de un kilómetro) cada una con zona de DRS y velocidades top estimadas (muy a la baja) en 320 kilómetros por hora, aunque varios pilotos, tras correrlo en simuladores, creen que se podrían superar los 360 km/h: los pilotos irán con el acelerador a fondo durante más de la mitad de la vuelta.