Finalmente, y por la crisis que se vive en Medio Oriente, la Federación Internacional de Tenis decidió que la serie entre Israel y la Argentina, por el repechaje de la Copa Davis, no se juegue en Tel Aviv, pero recién en tres días anunciará el nuevo escenario.

"No era una decisión con sentido común ir a jugar allá. Mucha gente adentro de un estadio, con personas heridas a pocos kilómetros. Es una situación compleja para nosotros, los jugadores y para ellos también", dijo el presidente de la Asociación Argentina de Tenis, Arturo Grimaldi.