Lujo, mercadillo y vintage
Londres es la ciudad de los mil estilos, de las mil propuestas. En sus calles el lujo de las grandes firmas se mezcla con las curiosas tiendas vintage y los pintorescos mercados callejeros. Es la ciudad europea ideal para ir de "shopping", además de ser un escaparate de oportunidades.
Y de oportunidades y de moda entiende mucho Gabriela Montaraz. Una joven mexicana que ha conseguido triunfar como modelo publicitaria y como actriz en la capital británica, donde vive desde hace siete años.
"He cumplido mi sueño, trabajar en lo que quería" y, además, en Londres, una gran ciudad donde "nacen muchas de las tendencias y propuestas" del mundo de la moda. "Aquí no te critican, no te ven feo si vas vestido diferente, al contrario te aceptan. Hay mucha libertad", asegura la mexicana, imagen de campañas publicitarias de firmas como Coca Cola Zero y Xbox.
Una libertad que se deja sentir en cualquier barrio de Londres, incluso en el exclusivo Mayfair. De la mano de Iván Después, maquillador hispano venezolano de la firma Mac Cosmetic, afincado en Londres desde hace tres años, recorremos este barrio sinónimo de elegancia y distinción, un paraíso del "shopping" más exquisito.
"Uno de los atractivos de Londres es la diferencia de estilos. Aquí la gente decide cómo quiere ser vista, se expresan por fuera", analiza el estilista con quien descubrimos los almacenes Selfridges, fundados en 1903, una especie de Harrods juvenil en el que destacan sus rompedores escaparates o su museo de zapatos con más de 4.000 pares. Su filosofía, "para todos los bolsillos", ha calado entre los jóvenes londinenses.
La segunda parada nos lleva a Bond Street donde conviven firmas internacionales como Louis Vuitton, cuya tienda ocupa más de 3.000 metros cuadrados, Piaget, Michael Kors, Dior, Jimmy Choo y la alta joyería de Asprey, mientras que en Bruton Street se muestran las propuestas de Kenzo, Brioni o Stella McCartney.
"Esta diseñadora es imagen de Londres,junto a Vivienne Westwood y Alexander McQueen, que está más presente que nunca", comenta Iván mientras pasea junto a los últimos modelos de Rolls Royce y Bentley que alcanzan precios de más de 400.000 libras. Un ambiente que rescata la imagen del "gentleman" inglés.
MÁS ALLÁ DE MAYFAIR.
Más allá de Mayfair, el "shopping" más británico nos lleva a Fortum & Mason, en la transitada Picadilly Street, unos almacenes familiares con más de tres siglos de historia que proveen a la casa real británica.
Un espectacular escaparate, presidido por un enorme reloj, recibe a los innumerables turistas que acuden a estos elegantes ultramarinos a comprar las galletas bañadas en chocolate preferidas por la reina Isabel de Inglaterra o a degustar alguna de las 120 variedades de té procedentes de todo el mundo.
Tras dejar Fortum & Mason y adentrarnos en el lujoso barrio de Knightsbridge, la opulencia de Harrods obliga a una visita.
Convertido en una atracción turística más de Londres, estos grandes almacenes, que fueron vendidos en 2010 por el magnate Mohammed Al Fayed a la familia real qatarí por más de 2.200 millones de dólares, ofrecen todo tipo de productos y sus temporadas de rebajas son las más esperadas en todo el mundo. Su viejo lema "Omnia, Omnibus, Ubique" (todo, para todos, en todas partes), sigue más vigente que nunca.
IMPRESCINDIBLE PHILIP TREACY.
La opulencia de Harrods contrasta con una pequeña y elegante tienda en Elizabeth Street. Aquí, en 40 metros cuadrados, es donde el consagrado sombrerero Philip Treacy vende sus mundialmente conocidas creaciones.
"Cada sombrero, cada tocado, tiene una forma diferente porque Philip los realiza personalmente", explica Alexandra Greco, responsable de comunicación de la firma, quien reconoce que la realeza británica es su principal cliente. "Ellos llevan sombreros en cada ocasión y por eso en Inglaterra esta costumbre está tan arraigada".
Alexandra Greco explica que la firma Philip Treacy trabaja "con los diseñadores más importantes del mundo. Cuando tratas con diferentes estilos, diferentes marcas, siempre haces algo diferente" y eso ha distinguido a este diseñador de origen irlandés, reconocido como el mejor sombrerero del mundo.
Pero al hablar de compras en Londres es obligatorio referirse a sus fantásticos mercadillos callejeros. Camden Town, Portobello o Brick Lane aparecen entre los lugares más visitados de la capital británica, espacios donde se puede comprar de todo y encontrar cualquier rareza.
Ropa, alimentos, antigüedades, objetos de coleccionismo se agolpan en estos santuarios del "shopping" callejero que tanta identidad y fama internacional han dado a Londres.
Y para poner un punto y final redondo a un día de compras en Londres nada mejor que visitar una de las tiendas "vintage", tan presentes en esta ciudad.
Fee Doran, encargada de Mrs Jones & Me, en el East London, una "boutique" que rescata vestidos del último siglo y los transforma en maravillosas piezas únicas que lucen "celebrities" como Katy Perry o Kylie Minogue comenta: "se trata de piezas antiguas a las que les damos una nueva vida, las costumizamos".
Diseños de otra época que se convierten en piezas de vanguardia cuando el genio creativo de Fee Doran los fusiona. Entonces surge un tipo de ropa para lucir en ocasiones especiales que evocan décadas pasadas.
Como el "vintage", el "shopping" en Londres está más vivo que nunca.