El entrenador del seleccionado brasileño de fútbol, Mano Menezes, afirmó que su equipo quería "jugar" y que por eso esperó "un tiempo prudencial", antes que se suspendiera por falta de iluminación en el estadio Bicentenario de Resistencia la revancha ante Argentina, por el Superclásico de las Américas


"Nosotros queríamos jugar y esperamos el tiempo prudencial. Ahora las que definen si se vuelve a jugar son las asociaciones", admitió el DT del combinado `verdeamarelho`.



Menezes admitió: "Estábamos preparados adecuadamente para jugar fútbol. Estamos decepcionados y con tristeza por no haber podido jugar".



"Lo que aconteció nos lleva a pensar que Argentina y Brasil no deben pasar por una situación como ésta. Es una decepción bastante grande de estos profesionales", continuó.



Luego el entrenador dijo: "Ahora debemos respetar a los clubes brasileños que deben jugar el sábado y por eso nos debemos ir para Brasil", sentenció.