Nasser Al Attiyah dijo que podría dejar el Dakar, pero no el automovilismo
El qatarí, campeón del Dakar en 2011 y líder hasta el momento de la competencia, ratificó que vino a ganar el rally y dejó abierta la posibilidad de retirarse como piloto.
"Vinimos acá a ganar el Dakar, ese fue siempre nuestro objetivo”, señaló el qatarí, que inesperadamente disparó:
“Mañana tal vez pare de correr. Ya es suficiente. Tal vez haya un nuevo Nasser dentro del automovilismo”, disparó.
Distendido, sonriente y derrochando caballerosidad, como es su costumbre, incluso cuando las cosas no le salen como se propone, recibió a la agencia durante el día de descanso el Iquique.
Antes de iniciar la charla, el “Príncipe qatarí” pasó largo rato con uno de los mecánicos que atiende a uno de los Mini que está en carrera.
A esas horas, el sol del desierto de Atacama picaba en la piel y aprisionaba la cabeza, algo que para Al Attiyah es normal ya que en Qatar las temperaturas son implacables y mucho menos amigables que en estas áridas tierras trasandinas , donde no suben más de 25º.
Al Attiyah se preocupó por tener esta charla bajo la carpa de su equipo, allí donde ponían a punto su Mini y un sistema de refrigeración llevaba alivio al alma.
Nasser elogia al saudí Yazeed Alrajhi (Toyota), quien en su primer Dakar ganó una etapa y marcha tercero en la general.
“Demostró que es muy rápido, me siento feliz por él porque durante muchos años yo lo impulsé a que viniera correr el Dakar”
Es ahí cuando Al Attiyah revela la clave de lo que puede ser su futuro: “Ahora estamos preparando a dos pilotos de Qatar para traerlos el año próximo año porque tal vez mañana yo pare de correr, ya es suficiente”.
En cuanto a lo que aún queda por delante, el qatarí dijo que está tranquilo y que como ya se sabe un Dakar es cosa de todos los días pero no le preocupa la diferencia que le lleva a Giniel De Villres (Toyota), campeón del primer Dakar sudamericano en 2009, y segundo en la general en 2009.
“Si mañana De Villers, me alcanza, bueno, no hay problema, pasado mañana lo puedo alcanzar yo”, dijo confiado.
En ese sentido, opinó que “la pela está ahí con De Villres pero Yazeed Alrajhi (Toyota) está ahí empujando aunque perdió seis minutos respecto a Giniel”
Al Attiyah recalca que “Yazeed es buen piloto y lo tiene a Timmo (Gottschalk) que es muy buen navegante y conoce muchos secretos de mí. Estoy feliz de que haya otro árabe en el Dakar”.
El alemán Timmo Gottschalk fue copiloto de Nasser cuando ambos corrían para el equipo Volkswagen y fue con él con quien se consagró campeón hace cinco años.
Al hacer un balance sobre esta primera parte del rally, Al Attiyah admite que esta vez no hubo tanta arena y que fue diferente que otros años.
“Fue distinto, sí, igual nosotros tratamos de dar lo mejor cada día. Este Dakar fue muy duro para nosotros pero siempre vamos dar lo mejor de nosotros”.