Independiente todavía no ha encontrado su mejor nivel en el campeonato local. Sus mejores partidos, curiosamente, fueron contra el Santos en Copa Sudamericana y no ganó ninguno de los dos. A pesar de eso, sigue invicto y suma siete de nueve. Le ganó por 2 a 0 a Patronato a en el Libertadores de América con goles de Andrés Roa y Silvio Romero y se ubica entre los primeros.

El conjunto entrerriano carece de valores individuales altamente determinantes. Pero, como equipo tiene intenciones interesantes. Busca jugar alto y ahogar al rival y suele conseguirlo. Durante los primeros minutos del juego obligó a la imprecisión permanente al Rojo.

Con el correr de los minutos, el visitante cedió en el aspecto físico y el local consiguió salir y manejar la pelota en ataque. El equipo de Julio César Falcioni la tuvo en zona ofensiva pero no generó mucho daño. Tomó malas decisiones en el momento de romper en tres cuartos de cancha y sólo generó una situación de gol, más producto de el azar y de errores rivales que de virtudes propias. Luego de un córner, Lucas Romero quiso cabecear, no pudo, Oliver Benítez despejó pero rebotó en Lautaro Geminiani y casi se mete. El propio Benitez salvó milagrosamente en la línea.

En el arranque de la segunda mitad, cuando el Patrón pasaba por un buen momento, el Rey de Copas metió una estocada clave en el partido. Silvio Romero y Fabricio Bustos armaron una buena jugada por derecha, el lateral metió centro bajo y tras una pifia grosera de Sebastián Palacios, Roa, con una sutileza, ubicó la pelota contra el segundo palo.

El equipo que dirige Iván Delfino se adelantó un poco y dejó espacios, por lo que el local pudo definir la historia. A los 20, tras una buena jugada de Alan Velasco y un centro posterior de Lucas Rodríguez, Silvio Romero, sin ningún tipo de marca, cabeceó suave y al medio para que retenga Matías Ibañez. Pero, cuatro minutos después tuvo su revancha. 

El Rojo estaba apurado contra la línea por el sector izquierdo pero Lucas Romero clarificó todo con un gran cambio de frente. Palacios aceleró se abrió hacia la derecha y dejó el callejón para que el centro delantero aparezca por el medio y defina de primera contra un palo.

Patronato no tuvo más imaginación para incomodar al equipo de Falcioni en lo que quedó de juego. Sin sufrir demasiado pero muy lejos de brillar, Independiente sumó su segunda victoria consecutiva. Parece difícil que con este plantel pueda aspirar a un título, pero hasta ahora, en términos de resultados, ha cumplido bastante.