Wiggins y el imperio británico, adiós de oro de Vinokourov e histórica Pajón
El oro en la contrarreloj de Bradley Wiggins realzó el dominio del imperio británico en ciclismo, especialmente en el velódromo, de la mano de Chris Hoy, mientras fue el kazajo Alexandr Vinoukourov el que ganó en la prueba de ruta en vísperas de su retirada en la competición, impensable aún para la colombiana Mariana Pajón, la más fuerte en BMX.
El checo Jaroslav Kulhavy se colgó la medalla de oro olímpica de bicicleta de montaña, obtenida en el circuito habilitado en Hadleigh Farm de Essex, después de volver a imponerse, en un final trepidante, al suizo Nino Schurter, vigente campeón del mundo, al italiano Marco Aurelio Fontana y al español Jose Antonio Hermida, que fue cuarto. Kulhavy acabó con la hegemonía del francés Julien Absalon, campeón olímpico en Atenas y Pekín.
Pero fue gracias a Wiggins y Hoy, por lo que el ciclismo del Reino Unido recordará el verano de 2012 como el momento en el que adquirió un protagonismo inédito en las Islas y llegó a competir en interés para los aficionados locales con deportes como el atletismo y el tenis.
Fue primero el flamante ganador del Tour de Francia el que acaparó el protagonismo sobre las dos ruedas a la entrada de los Juegos.
Sumó su séptima medalla olímpica para convertirse en el atleta del Reino Unido que más veces ha subido en la historia al podio en unos Juegos.
Un día antes, el Vinokourov, del Astana, se proclamó nuevo campeón olímpico de ciclismo en ruta, al vencer en The Mall londinense por delante del colombiano Rigoberto Urán, que tocó la gloria dorada pero se tuvo que conformar con la plateada.
Vinokourov, que releva en el palmarés al español Samuel Sánchez, tendrá una retirada dorada, algo hasta hace muy poco impensable. El pasado año estuvo más cerca de la retirada que de la continuidad, pero finalmente optó por no arrojar la toalla. Merced a su inteligencia táctica y potencia, puede dejar el ciclismo en activo, si es que no vuelve apostar por seguir, con un oro y con la condición de campeón olímpico de la prueba más veterano.
El kazajo superó con su potencia habitual, inconfundible, en los últimos metros a Urán, con el que se había escapado a poco más de siete kilómetros de la meta, instalada en las cercanías de Buckingham Palace.
Después llegó la hora de Bradley Wiggins. Ganó el oro en la contrarreloj de Londres 2012 y sumó su séptima medalla olímpica para convertirse en el atleta del Reino Unido que más veces ha subido en la historia al podio en unos Juegos.
El ganador del último Tour de Francia cubrió los 44 kilómetros de la prueba en 50 minutos y 39 segundos, mientras que el alemán Tony Martin, plata, entró 42 segundos por detrás de Wiggins, y el también británico Christopher Froome a un minuto y ocho segundos de su compatriota.
Con un su nueva victoria, Wiggins suma cuatro medallas de oro, una de plata y dos de bronce, que ha ganado entre Sydeney 2000 y Pekín 2008, una más que el legendario remero británico Steve Redgrave, que obtuvo medalla en cinco Jueos consecutivos, desde 1984 hasta 2000.
Jonathan Castroviejo fue el primer español clasificado en la prueba, en la novena posición, mientras que Luis León Sánchez, que entraba en las apuestas como favorito a medalla, rompió la cadena de su bicicleta a la salida y pinchó después una rueda, lo que le impidió luchar con los mejores y terminó en el puesto número 32.
El velódromo del Parque Olímpico prolongó el dominio británico. La séptima medalla que logró el caballero del Imperio Británico Chris Hoy asegura al ciclista, de 36 años, también un lugar preeminente en las leyendas deportivas del Reino Unido.
Con su sexto oro, más que ningún otro atleta británico en la historia, el ciclista deja su nombre grabado junto al de héroes nacionales como Geoff Hurst, que marcó tres goles contra Alemania en la final del Mundial de fútbol de 1966, o el de Fred Perry, campeón en Wimbledon en tres ocasiones, hace más de 75 años.
También se compara, sobre todo, con el propio Wiggins, primer británico en ganar el Tour de Francia hace apenas dos semanas y poseedor también de siete medallas olímpicas, así como con el remero Steve Redgrave, que con cinco oros era hasta hoy el atleta del Reino Unido con más metales dorados.
El escocés, abanderado del Reino Unido en la ceremonia de inauguración del pasado 27 de julio, logró su primera plata hace doce años, su primer metal dorado hace ocho, y estalló hace cuatro, en Pekín, con tres oros históricos que le valieron la distinción por parte de la reina Isabel II como caballero del Imperio.
El BMX realzó del deporte colombiano, que vivió en Londres 2012 un momento histórico. Mariana Pajón ganó la medalla de oro en la categoría femenina de BMX. Llenó de oro a Colombia, que solo contaba, hasta ahora, con una única campeona olímpica en la historia de los Juegos, Maria Isabel Urrutia, en halterofilia, en Sydney 2000.
La corredora de Medellín, de 20 años, dio una exhibición ante el resto de rivales, a las que ganó en cada una de las pruebas de la jornada, hasta alcanzar lo más alto del podio.
Pero además, su compatriota Carlos Oquendo redondeó la sesión y convirtió en inolvidable la celebración olímpica londinense. De forma inesperada por los pronósticos, acabó con el bronce de la prueba masculina colgado al cuello.