¡Ojalá el presidente esté haciendo terapia, le va a ayudar mucho para ordenar sus ideas!
En una charla distendida con Alejandra Canosa, el humorista habló de su nuevo espectáculo con Miguel Ángel Cherutti, de la trayectoria, de los amigos, del vínculo con sus hijos, de los duelos amorosos y de su relación con el presidente Javier Milei.
La cita fue en un bar notable de Buenos Aires y aunque no lo crean ¡Nito llegó puntual! Se lo ve contento, tranquilo y de muy buen humor. ¡Qué tomás Canosa? pregunta Nito quien minutos después le pide al mozo dos cortados en jarrito y un tostado de jamón y queso. “¡Estamos muy contentos haciendo “TOY SIN PLATA”! arranca contando Nito respecto del nuevo espectáculo con Miguel” Anteriormente habíamos hecho una gira muy intensa los dos solos, después con Carmen Barbieri, estuvimos en Punta del Este y pensamos volver el año que viene. Con respecto al espectáculo nuevo, se nos ocurrió hacer seis funciones en el Astral con Pampas Bravas, Adriana Brodsky, Romina Uhrig, Tamara Bella y Belén Di Giorgio. El espectáculo funcionó muy bien así que volveremos al Astral en septiembre y en la medida que podamos según los compromisos tomados por el teatro, principalmente por los horarios, considerando que “Pampas Bravas” necesitan preparar el escenario y hay que poner una capa de goma para no romperlo. Fuera de eso, estamos muy felices de poder festejar con Miguel en calle Corrientes y de haber llenado en casi todas las funciones. Pronto se viene una gira por la provincia de Santa Fe, sur del país y después nos vamos a Paraguay. Ya estamos pensando en el verano y tenemos que decidir si vamos a Mar del Plata o Carlos Paz, sin descuidar la plaza de Punta del Este que el año pasado fue un éxito durante tres meses.
¿Cuándo y cómo se conocieron con Cherutti?
¡Nos conocíamos a través de la televisión! Yo le había propuesto trabajar juntos un año antes de que empezáramos profesionalmente, pero en ese momento él estaba haciendo “30 años de Magia” ni más ni menos que con Sandro y en Mar del Plata. Lo invité a tomar un café y le dije ¡creo que tenemos que unirnos y hacer un espectáculo juntos: él desde lo musical y yo con mis monólogos, pero estaba agrandado y no me dio bolilla” afirma Nito entre risas. Un año después, le volví a insistir y debutamos con “Los Bellos y las Bestias” en Mar del Plata y fue un éxito. Después hicimos “Las cosas del joder”, “Nación imposible”, “La dama y los vagabundos” espectáculo con el que Moria regresó a la revista. “Tetanic” con Isabel Sarli, “Lo que el turco se llevó”, “Cantando bajo la deuda” y otros tantos hasta hoy.
En 30 años hubo encuentros y desencuentros ¿Qué los une hoy debajo del escenario?
¡Sí, claro! Hubo una época en la que estuvimos distanciados cuando en tiempos de corralito financiero, yo recibía a políticos en el teatro y hacía marchas, entonces se dificultaba mucho, pero después lo entendió perfectamente y hemos mantenido la amistad en el tiempo. ¡Nos queremos y nos divertimos mucho arriba y abajo el escenario y ese es el secreto de seguir juntos! Somos la unión de dos individualidades, cada uno tiene su show, pero juntos nos potenciamos y el público agradece.
¿Son amigos?
Sí, Somos amigos, nos divertimos y nos emocionamos juntos, hablamos de la vida, de nuestros hijos, compartimos buenos momentos después del show, tomamos un vinito tinto, ¡otras veces nos tomamos un whisky…! Los dos estamos solos sentimentalmente hablando así que es una buena etapa para hablar de distintos temas y reflexionar sobre la vida.
Si ponés en la balanza ¿Ganaste mucho dinero, perdiste o saliste hecho?
Mirá, tengo más de 40 producciones hechas y he recibido un halago de Argentores como autor por todo eso más lo que actué, así que estoy muy satisfecho! Si pongo la balanza, desde que empecé mi carrera viví del espectáculo y ha sido muy positivo para mí. Viví de lo que me ha dado el teatro y de las grandes producciones por las que recibí enormes satisfacciones, no específicamente de espectáculos propios, sino de “Viva el Chamamé” que fue un éxito durante siete años en el Luna Park junto a Norberto Bacón, “La jaula de las locas” con Raúl Lavié y Cecilia (Milone) y fue un exitazo.
Como productor tengo que agradecerle siempre al público que nos ha acompañado.
En una época fuiste “el rey de la impuntualidad” ¿Cómo venís con los tiempos?
Bueno, como bien decís ¡fui el rey de puntualidad! porque he mejorado mucho, sobre todo respetando a la gente que me espera o me ha esperado a la salida del teatro. Me hicieron esa fama porque llegaba tarde a los espectáculos por la sencilla razón que los últimos 15 o 20 ‘se suelen vender más entradas.
¿Querés decir que llegabas tarde a propósito?
Sí, claro, porque ver la fila de gente esperando en la puerta del teatro atrae al público y por lo general les sugiero a los boleteros que ¡Por favor, no den sala tan rápido! porque si el espectáculo empieza a las 21 hs vos pasas 21.01 creés que la sala está con poca gente y no entusiasma.
Con respecto a la impuntualidad, mi psicólogo me dijo que, yo llegué tarde a la vida porque mi mamá me tuvo de grande, entonces pareciera que ese fue el problema. ¡Ya es un mito!
Me pasaba en mis épocas donde estaba metido de lleno en la política, porque tenía reuniones muy temprano en el Senado, pero después todo se fue acomodando. Prácticamente tuve asistencia perfecta durante los seis años como senador y hoy eso mejoró muchísimo. ¿Convengamos que llegar un poco tarde es bien argentino?
¿Alguna anécdota de las viejas épocas?
Sí, una vez se me rompió la camioneta yendo a Bolívar, tuve que hacer dedo y Cherutti tuvo que empezar el espectáculo y se bancó una hora y cuarto arriba del escenario aguantando hasta que yo llegara. Entré por atrás, donde estaba el público, me cambié en el hall del teatro y entré con el smoking saludando y agradeciéndole a Miguel con la mejor onda. Lo que pasó es que fui con el horario muy justo y no me quería levantar nadie porque yo llevaba un sable y un casco que eran para un desfile que yo hacía en el espectáculo. Paró un camionero y cuando vio que yo corría con un sable aceleró y se fue hasta que me levantó una familia de Bolívar y me llevó porque la mujer del conductor me reconoció. ¡Al otro día Miguel se tuvo que aplicar una inyección porque se había quedado sin voz de tanto hablar!
Hace algunos años atrás fuiste productor del espectáculo “El consultorio de Milei”, hoy presidente de los argentinos. ¿Lo llamaste para saludarlo?
Bueno Milei me fue a ver a mi casa para pedirme el Teatro Picadilly y que lo produjera y dirigiera en “El Consultorio de Milei” y finalmente salió un espectáculo brillante. A mí me gusta más como actor que como presidente. ¡Tenía ángel arriba del escenario! Karina, su hermana me pidió actuar y también estuvo, junto a Claudio Rico y Diego Sucalesca. Era un consultorio donde Milei hablaba de economía y después entraba Claudio Rico (humorista), Sucalesca era el psicólogo.
Iban trescientos pibes todos los viernes y se llenaba. El final del espectáculo era genial porque entraban los tres personajes, le ponían un chaleco de fuerza y se lo llevaban porque él le pegaba a una piñata que representaba el Banco Central.
Después pensamos en reprogramar el espectáculo, pero nos peleamos una hora en el programa “Intratables” que se emitía por América. Hubo discusión y debate porque yo le pregunté cómo resolver la desigualdad con el anarcoliberalismo y se puso a gritar, me lo dijo nazi, fascista, no sé qué esas cosas que tiene y bueno, ahora hablo con otro respeto porque respeto la democracia. No comparto sus ideas liberales ni neoliberales ni anarcoliberales, pero es lo que eligió la ciudadanía, así que soy respetuoso de la democracia. En un momento le aconsejé y le sugerí que hiciera terapia porque le iba a ayudar a ordenar sus ideas y algunas cosas de su vida que él me contó que por supuesto no voy a contar. ¡La experiencia del teatro con él fue muy buena!
¿Tenés vínculo con él hoy?
Lo saludé en el Luna Park cuando coincidimos en “Drácula” y me saludó muy nervioso, me estrechó la mano muy fuerte y Karina no me saludó. Así que, no tengo digamos una buena relación hoy con personal, pero por supuesto que tengo una relación de respeto porque es el presidente elegido por la democracia
l¿Cómo es el vínculo con tus hijos y con Sabrina que vive en el exterior?
Muy bueno, Juan Manuel es actor, Leandro Licenciado en Economía y músico, ambos están trabajando muy bien y a pesar de que están con mucho trabajo nos hacemos tiempo para ir al teatro, salir a cenar, jugar al fútbol los lunes. Más allá de las diferencias entre padres e hijos uno los ama con locura. Sabrina, hace más de cinco años que vive en Francia, estaba trabajando muy bien acá, es una gran actriz de comedia musical, sin embargo, optó por hacer una experiencia en el exterior y se casó con John que es argentino y chef y juntos han puesto su propio negocio allá. Y por supuesto me dieron una alegría infinita con el nacimiento de Muna, mi nieta a quien voy a ir a ver en menos de un mes. Con los nietos se abre un canal de amor nuevo, es inexplicable lo que siente un abuelo el amor por los nietos. ¡los hijos me llenan el alma de alegría y esperanza y con Muna se ha acrecentado más todavía!
¿Cuáles son los límites del humor? ¡Hoy hay que ser extremadamente cuidadoso…!
Con respecto a los chistes, uno tiene el límite del sentido común y de la experiencia de tantos años arriba del escenario. Para mí, la mejor profesión del mundo es hacer reír y cuando desde arriba del escenario veo al público reírse me llena el alma de alegría. Eso es maravilloso y al día de hoy no tengo más que agradecimiento.
Nosotros venimos desde hace mucho tiempo, cuidándonos para cuidar, no se debe cosificar ni a la mujer ni al hombre. Depende mucho el estilo de cada uno y el público sabe lo que va a ver, yo tengo un estilo en el que el humor siempre tiene que tener compasión.
Esa es la palabra ¡compasión! porque si uno hace un chiste demasiado fuerte o demasiado irónico ya deja de ser chiste para convertirse, quizá en una ofensa personal. Puedo hacer un chiste con doble sentido, pero nunca para que le cause dolor a nadie.
¿Seguís jugando al fútbol con amigos?
Sí, juego al fútbol dos veces por semana y los lunes en River hace más de veinte años ¡Eso me hace muy feliz también! Tengo amigos con los que jugamos al fútbol y aprovechando que en octubre es mi cumpleaños, llegarán varios de Corrientes, de Mar del Plata con los que juego todos los años y esta vez se sumará gente de Uruguay que conocí este año. Después haremos un gran asado con artistas, gente de la política, amigos de Corrientes, de Buenos Aires ¡Son como 300! Por eso mis hijos no van porque no conocen a muchos de ellos.
Los miércoles agregué fútbol mixto con mujeres maravillosas y salen unos partidos espectaculares.
Soy muy muy futbolero con mis hijos también. Ahora dejé de ir un poco a la cancha, no me gusta que sólo un equipo tenga hinchada y el otro no, es una de las cosas que tenemos que superar en Argentina, si no podemos superar esa convivencia, no vamos a mejorar nunca.
¿En qué etapa de tu vida te encontrás?
En una etapa en la que hablo mucho con mis hijos, con Miguel Ángel también y con pocos amigos. A decir verdad, tengo más amigas que amigos, con ellos asados y fútbol está bien, pero a mí me gusta interpelar a la mujer tener amigas con las que pueda hablar de cosas más sensibles, de la vida, del amor.
Cuando hablo con mis amigos o mis hijos siempre les pregunto en qué minuto del segundo tiempo estoy.
¡Estoy jugando en el segundo tiempo y estoy en la etapa de sanar, de mejorar mi ser!
Hoy puedo advertir hacer más autocrítica de lo que ha hecho en la vida y estoy en una etapa donde disfruto de lo que me gusta.
Estoy en una etapa nueva porque acabo de terminar otro matrimonio y siempre es doloroso. Fue la quinta pareja, el quinto duelo y me ayudó mucho hacer terapia, por eso siempre aconsejo hacer terapia porque ayuda a ordenar las ideas, para darse cuenta de lo que uno viene arrastrando desde la niñez y muchas veces no puede cubrir ciertos afectos y como adulto hay que darse cuenta.
¿Pudiste cerrar la historia con Cecilia Milone, tu última pareja?
Bueno, creo que ya hemos hablado bastante ambos, ella ha escrito muchísimo durante todo este tiempo y yo he hecho declaraciones, porque a mí me gusta, me parece que uno debe abordar esos temas, sobre todo cuando se han dicho tantas inexactitudes. Fue una gran historia de amor y también un gran dolor en el final. Me quedo con lo mejor, con haber vivido en el paraíso en algunos momentos de esa relación y por supuesto de haberlo disfrutado.
Hago mi autocrítica y como en el fútbol, uno mira el VAR pero me queda lo mejor de haber vivido una historia de amor. Tanto mi ex esposa y yo seguimos evolucionando y vamos en búsqueda de hacer lo que nos gusta. P
Creo que he superado el dolor y, por supuesto que siempre va a quedar un poco de nostalgia. ¡Siempre la voy a recordar con cariño y respeto!
¿Con quién te sentarías a conversar sin tiempo?
Si pudiera volar con la imaginación, me sentaría a hablar con mi viejo, le pediría perdón por no haberlo acompañado y escuchado más.
Yo era muy adolescente cuando se fue y me hubiera gustado estar más tiempo con él, conocerlo más, escuchar más historias de las que me contaba, caminar juntos por el campo, observar los pájaros, disfrutar de la naturaleza. Mi viejo me contaba historias de Corrientes, de nuestra familia, de la pasión que sentía por la política, pero sobre todo de sus cosas. Ya estaba grande y enfermo mi padre cuando se murió y me quedé con las ganas de seguir conversando con él!