Una explosión masiva y simultánea de pagers -equipos buscapersonas- en Siria y el Líbano ocurrió este martes y tuvo como blanco miembros del grupo terrorista chiita libanés Hezbollah. Hay ocho muertos y más de 2.800 heridos, de los cuales 200 están graves. Investigan si se trató de un plan armado por Israel.

Uno de los heridos fue el embajador de Irán en Líbano, Mojtaba Amani, quien se encuentra en "buen" estado tras haber sufrido una herida superficial este martes en la cadena de explosiones. Así lo informó informó en su cuenta de X la delegación diplomática iraní. "Varios miembros del grupo libanés Hezbollahl legaron a los hospitales de Damasco y de la provincia de Rif Damasco tras resultar heridos por la explosión de buscapersonas que llevaban encima", aseguró la organización en un comunicado.

Hezbollah confirmó inicialmente que numerosos de los pagers estaban en posesión de sus miembros y causaron la muerte de al menos tres personas, entre ellos una menor y dos integrantes del movimiento. Por ese motivo las primeras sospechan recaen en una acción coordinada de Israel. Pasado el mediodía, el Ministerio de Salud Pública de Líbano informó elevó las cifras a ocho muertos y más de 2.800 heridos, entre ellos 200 de gravedad.

Según la ONG, con sede en el Reino Unido y una amplia red de colaboradores sobre el terreno, una de las explosiones tuvo lugar en el interior de un vehículo que circulaba por las inmediaciones del barrio capitalino de Kafr Sousa.

Los bíperes o buscapersonas, aparatos de mensajería que no requiere tarjeta SIM ni conexión a internet, explotaron casi simultáneamente en varias regiones del país en las que la formación está implantada. Según el l ministro de Salud libanés, Firass Abiad, la mayoría de las víctimas presentan heridas "en el rostro, en la mano, en el vientre e incluso en los ojos".