Aplazan el fallo definitivo que condena a muerte al depuesto presidente Mursi
El Tribunal Penal de El Cairo la pospuso hasta el 16 de junio. El derrocado mandatario fue condenado a muerte por intentar fugarse de la cárcel que le propinaron los golpistas.
El Tribunal Penal de El Cairo decidió aplazar al próximo 16 de junio su dictamen del fallo definitivo sobre la condena a muerte emitida de forma preliminar hace dos semanas contra el ex presidente egipcio Mohamed Mursi, del movimiento islamista Hermandad Musulmana. Durante la breve sesión, el juez Shaaban al Shami no se pronunció respecto a esta sentencia, relacionada con la huida de una cárcel durante la revolución que en 2011 derrocó al entonces presidente Hosni Mubarak.
El magistrado también pospuso hasta el 16 de junio su fallo contra Mursi en una causa de espionaje y colaboración con el movimiento islamista palestino Hamas.
La corte recibió la opinión no vinculante del mufti Shauqi Alam, máxima autoridad religiosa musulmana de Egipto, pero decidió aplazar el juicio para "completar las deliberaciones", según dijo Al Shami, que ordenó la continuación de la detención de Mursi y los otros procesados. El abogado de la defensa Samir Mahfud explicó que el aplazamiento se debe a que el juez obtuvo la opinión del mufti esta mañana y no dispuso de tiempo suficiente para estudiarla.
El dictamen del mufti es secreto, pero Mahfud dijo haber tenido acceso al mismo y señaló que este ni rechaza ni aprueba las condenas a muerte, sino que deja en manos del tribunal la decisión. A juicio del letrado, la corte rebajará las sentencias impuestas de manera provisional el pasado 16 de mayo al ex presidente y a otros 128 islamistas, la mayoría procesados en rebeldía, por urdir su huida de la cárcel de Wadi Natrun, en las afueras de El Cairo. Tanto en el caso de espionaje como en el de la fuga de la prisión, el 16 de mayo fueron sentenciados a la pena capital provisionalmente varios dirigentes islamistas, entre ellos el líder de la Hermandad Musulmana, Mohamed Badia, el "número dos" de la organización, Jairat al Shater, y su hijo.