Reguladores de la UE acusaron a Apple de violar la ley de competencia al limitar el acceso de los rivales a tecnología que es clave para realizar pagos sin contacto, beneficiando a su propio servicio "Apple Pay".

Margrethe Vestager, vicepresidenta ejecutiva de la comisión a cargo de la política de competencia, señaló que “de forma preliminar, hemos descubierto que Apple abusó de su posición dominante” y agregó que “Apple restringió el acceso a insumos clave que son necesarios para desarrollar y ejecutar aplicaciones de pagos móviles. La evidencia en nuestro archivo indica que algunos desarrolladores no siguieron adelante con sus planes porque no pudieron llegar a los usuarios de iPhone”.