Barack Obama felicitó a Abbas y Netanyahu
El presidente de los EEUU se comunicó telefónicamente con los mandatarios de Palestina e Israel para "saludar el liderazgo y el coraje de ambos", anunció la Casa Blanca.
El presidente Barack Obama telefoneó este jueves al primer ministro israelí Benjamin Netanyahu y al presidente palestino Mahmoud Abbas, luego de la reanudación de las conversaciones directas de paz esta semana, anunció la Casa Blanca.
Obama saludó el "liderazgo y el coraje" de Abbas y de Netanyahu por haber aceptado reanudar las negociaciones de paz, dijo la Casa Blanca.
En dos comunicados separados pero con casi idéntica formulación difundidos al término de las conversaciones telefónicas que mantuvo por separado con los dos líderes, la presidencia estadounidense reiteró que apoyará las negociaciones entre las dos partes, que se reanudaron el lunes pasado en Washington.
Obama expresó a Netanyahu que Estados Unidos en los próximos meses apoyará a las partes "plenamente en sus esfuerzos por lograr la paz".
En la misiva envidada a Abbas, el mandatario estadounidense subrayó que "Estados Unidos está listo para apoyar a las partes a alcanzar una paz justa y durable en base a una solución de dos Estados".
Los negociadores israelíes y palestinos, que después de tres años de bloqueo retomaron su diálogo directo bajo el impulso de los Estados Unidos, acordaron el martes volver a reunirse en dos semanas, con el objetivo de alcanzar un acuerdo final en nueve meses.
Las dos partes se reunirán ya sea en Israel o en los territorios palestinos y "nuestro objetivo será" alcanzar un "acuerdo sobre el estatus final en el transcurso de los próximos nueve meses", dijo el secretario de Estado estadounidense John Kerry a periodistas.
Obama, había recibido el martes a los negociadores israelíes y palestinos y se congratuló por el "coraje" demostrado por ambos, había expresado el vocero presidencial Jay Carney.
El mandatario convirtió la solución de este conflicto en una de las prioridades de su primer mandato en enero de 2009, antes de que fracasaran las negociaciones.