En el Foro de Davós, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, invitó a empresarios de todo el mundo a considerar la producción de sus bienes en el territorio estadounidense. Durante su discurso, transmitido por videoconferencia desde la Casa Blanca, Trump enfatizó que las empresas que no opten por producir en Estados Unidos enfrentarán aranceles al importar sus productos a dicho país. 

Trump declaró: "Mi mensaje para todas las empresas del mundo es simple: vengan a fabricar sus productos a Estados Unidos y se beneficiarán de unos impuestos entre los más bajos del mundo". Esta afirmación fue realizada en un contexto en el que Trump había sido investido para un segundo mandato, y su intervención era esperada tras una serie de decretos firmados desde su retorno al poder. 

Desde su llegada a la presidencia, Trump ha manifestado su intención de aplicar aranceles de manera generalizada, afectando incluso a países que tradicionalmente han sido aliados comerciales de Estados Unidos, como México y Canadá. En este sentido, Trump mencionó la posibilidad de imponer impuestos del 25% a los productos provenientes de estos países. Asimismo, reiteró su postura respecto a China, destacando la necesidad de una política comercial más estricta. 

Durante su alocución, el presidente también abordó otros temas relevantes, como sus planes de reducción de impuestos y su enfoque en la lucha contra la inmigración irregular. Además, instó a Arabia Saudita y a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) a reducir los precios del petróleo, sugiriendo que una disminución en los costos podría tener un impacto positivo en la actual situación de conflicto entre Rusia y Ucrania.