Egipto: 98% de adhesión a la nueva Constitución, pero con un ausentismo del 67%
La baja participación (unos 17,5 millones de personas) se debe al boicot de los Hermanos Musulmanes y otros grupos islamistas afines.
Un 98% de los votantes dijo "Sí" a la nueva Constitución egipcia en el referéndum concluido ayer para reducir el tono islamista de la anterior Carta Magna y dar más poder a los militares, según resultados no oficiales. La abultada cifra de apoyo contrasta sin embargo con el nivel de participación, que habría llegado sólo al 33% de los habilitados para votar, indicó el diario estatal Al Ahram.
La baja participación se debe al boicot de los Hermanos Musulmanes y otros grupos islamistas afines, es decir, casi todos los partidos con niveles de adhesión importante. A la espera de los datos definitivos que tiene previsto anunciar la Comisión Electoral en un plazo de 72 horas desde el fin del plebiscito ayer, algunos de los medios estatales comenzaron a publicar los primeros resultados por provincias.
Unos 17,5 millones de egipcios acudieron a las urnas, lo que supondría una participación de poco más del 33%, incluidos los votantes en el extranjero, de los que participó algo menos del 10%. Uno de los objetivos de las autoridades era lograr una participación que supere al menos el 33% del anterior referéndum constitucional sobre la Carta Magna, redactada por los islamistas en 2012.
Ayer, el gobierno egipcio alardeó de alta participación, entre ellos el primer ministro, Hazem el Beblawy, quien aseguró que en algunas provincias sólo en la primera jornada de votación se había superado el total del plebiscito de 2012. Otros responsables subrayaron que la participación iba a superar a la de anteriores elecciones e incluso elevaron los datos a un 50%.
En cuanto a los resultados a favor de la Constitución, son similares en todas las provincias, superiores al 96%. Destaca Luxor, en el sur del país, con un 99,5% a favor del "Sí". La nueva Constitución sustituye la aprobada en 2012 por una mayoría islamista y fue suspendida por los militares tras el golpe de Estado de julio contra el presidente Mohamed Mursi.