El Papa exigió el fin del 'baño de sangre' en Siria y podría visitar Damasco
Lo hará "si las condiciones mejoran", indicó el Vaticano. Benedicto XVI se refirió a la matanza de Al Assad poco después de anunciarse su nueva visita a Medio Oriente
El Papa Benedicto XVI respaldó el plan de Naciones Unidas que busca poner fin al "baño de sangre" en Siria durante su mensaje por el Domingo de Resurrección y pidió "un compromiso inmediato" con los esfuerzos de paz que se llevan a cabo para la nación de Oriente Medio.
El líder católico de 84 años ofreció una bendición más corta de la habitual desde el balcón central de la Basílica de San Pedro luego de la misa al final de Semana Santa a la asistieron más de 100.000 personas en la Plaza de San Pedro, atestada de flores blancas y amarillas.
"Que la resurrección de Cristo otorgue esperanza a Oriente Medio y permita a todos los grupos religiosos, étnicos y culturales de esa región trabajar juntos para avanzar en el bien común y en el respeto por los derechos humanos", afirmó. "Particularmente en Siria, que termine el baño de sangre y se produzca un compromiso inmediato en el camino al respeto, al diálogo y a la reconciliación, tal como lo pidió la comunidad internacional", agregó.
El Domingo de Resurrección, el día más importante en el calendario litúrgico cristiano, se sumó a un periodo de intensa actividad para el Pontífice, el cual incluyó una visita a México y a Cuba a fines del mes pasado y cinco servicios religiosos en la última semana.
Antes de que el Papa hablara en Roma, las tropas leales al régimen de Al Assad atacaron zonas de la oposición durante la jornada de hoy y causaron la muertede 74 civiles, dijeron activistas prodemocráticos, en una ofensiva que envió a miles de refugiados hacia Turquía de cara a la tregua prevista para la semana próxima bajo el plan de paz de la ONU.
La hoja de ruta desarrollada por el enviado de la ONU y la Liga Arabe, Kofi Annan, busca declarar una tregua para el jueves si las fuerzas del regimen sirio empiezan a retirarse de los centros urbanos 48 horas antes.
El Papa también hizo un llamado por "la estabilidad y el desarrollo" en Irak, instó a israelíes y palestinos a "retomar con valentía un nuevo proceso de paz" y condenó los recientes "ataques salvajes terroristas" contra iglesias cristianas en Nigeria. Mientras se desarrollaba la misa, el Vaticano anunció que Benedicto XVI visitará el Líbano entre el 14 y 16 de septiembre, país que es considerado un ejemplo de coexistencia religiosa ya que la mitad de sus habitantes profesan la fe musulmana y, la otra, la católica.
De acuerdo a otra fuente, el Santo Padre podría incluso visitar Siria durante el viaje "si las condiciones mejoran".