Durante presentación de su campaña "Nadie Desechado", la organización denunció que la crisis provocó un aumento del 20 por ciento en la incidencia de enfermedades mentales en España, aseguró la investigadora Helena Legido-Quigley, especialista en salud global de la London Cchool of Hygiene and Tropical Medicine durante la presentación.

A su juicio, este dato, detectado en un estudio dirigido por su colega en el mismo centro, el profesor Martin McKee, es achacable a aspectos como "el desempleo o las hipotecas". La experta sostiene que también se elevó la tasa de suicidios a nivel nacional y comunitario por la recesión económica, y agregó que "no todos los países optaron por recortar", sino todo lo contrario, ya que "otros invirtieron más en salud o mantuvieron el gasto".

En su opinión, las reformas de sanidad aplicadas en España "no se basan en la evidencia y están siguiendo los mismos pasos dados en Grecia con anterioridad". En el país heleno, tras aplicar esas reformas "se incrementó en más de un 50 por ciento la tasa de VIH entre los años 2010 y 2011", además de que "la tuberculosis se disparó y apareció la malaria", explicó, según despacho de Europa Press.

Por esto, indica que un sistema sanitario de bajo costo es eficiente "si no hay muchas reformas y éstas se llevan a cabo por grupos formados". Sin embargo, en las aplicadas en España, "no existió debate ni en la sociedad, ni en el Congreso", lamentó.