Estados Unidos y China liman asperezas y cierran el diálogo con acuerdos
El sexto cónclave, implicó un significativo avance en varios acuerdos bilaterales y que soslayó temas sensibles y divergencias existentes entre ambas potencias.
Dos días de intensas conversaciones culminaron con más de cien acuerdos mayoritariamente económicos, pero también vinculados a la lucha contra el cambio climático, el tráfico de especies protegidas y la creación de grupos de trabajo para prevenir la proliferación de armas nucleares y reforzar el diálogo entre ambos ejércitos.
"Hoy, nuestros dos países deben buscar de forma creativa nuevas perspectivas en la cooperación bilateral", afirmó el presidente chino, citado por la agencia Xinhua, quien recordó que la construcción de un nuevo modelo de relaciones entre ambas potencias "no tiene precedentes en la historia".
"No hay ninguna experiencia de la que podamos aprender", dijo antes de advertir que Washington y Beijing "no pueden permitirse malos entendidos en temas fundamentales".
El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, en tanto, dijo en rueda de prensa que China "tiene un papel extremadamente importante que desempeñar en varias cuestiones globales" y que su país la espera "para ser socios en este empeño", informó la agencia de noticias EFE.
Kerry, acompañado por el secretario de Finanzas de Estados Unidos, Jacob Lew, llegó ayer a China en visita oficial de dos días, en medio de las tensiones generadas por las acusaciones de ciberespionaje lanzadas por Washington contra Beijing.
Durante las reuniones Washington y Beijing coincidieron en trabajar por la desnuclearización de Corea del Norte e Irán, el cese de la violencia y la reanudación de las negociaciones en Siria y la "reconciliación y revitalización" de Afganistán.
En el terreno económico, avanzaron en las negociaciones para la firma de un tratado de inversión bilateral.
Si bien ambos países dicen haber dialogado sobre aspectos de fricción como la ciberseguridad o las tensiones de soberanía entre China y sus vecinos asiáticos, los portavoces de las delegaciones minimizaron el tema en virtud de "los beneficios a largo plazo".
Una vez cerrado el diálogo, Kerry dijo en la rueda de prensa de la delegación norteamericana que Washington "no toma partido por ninguna de las partes" aludiendo a los conflictos marítimos de China con los países vecinos (Japón, Vietnam, Filipinas), y se limitó a señalar que que las acciones de Beijing "generan preocupación".
A la misma hora, el viceministro de Asuntos Exteriores chino, Zheng Zeguang, dijo que China "tiene una actitud firme en defender su soberanía" e instó a Estados Unidos a "adoptar un punto de vista objetivo", las mismas palabras que utilizó hace tres días cuando los encuentros no habían comenzado.
En el espinoso terreno de la ciberseguridad, y en medio de una nueva supuesta práctica de espionaje desde China a Estados Unidos que hoy publicó la prensa norteamericana, ambas delegaciones coincidieron en "trabajar conjuntamente" pero no lograron que el Grupo bilateral de Trabajo Cibernético retome sus actividades.
China suspendió este diálogo después de que el Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció la acusación de espionaje industrial a gran escala contra cinco miembros del Ejército Popular de Liberación chino.