Fukushima: detectan una avería en el sistema de reciclaje de agua radiactiva
La falla se detectó en la grúa que mueve el contenedor que almacena las sustancias contaminantes que se retiran del agua, explicó una portavoz de Tokyo Electric Power (TEPCO).
Los técnicos de la accidentada central nuclear de Fukushima en Japón detuvieron por una avería el sistema de reciclaje de agua radiactiva de la planta y desconocen en qué fecha podrá ser reactivado. (TEPCO, por su sigla en inglés.
Una vez que este tanque se llena, debe ser retirado y reemplazado por otro con la grúa, por lo que el tratamiento del líquido fue detenido, explicó TEPCO. Los ingenieros no lograron detectar aún la causa de la avería y tardarán entre uno y dos días más en revisar a fondo la grúa. Además se desconoce cuánto tardará en ser corregido el desperfecto y cuándo se volverá a poner en marcha el reciclado de agua.
El Sistema Avanzado de Procesamiento de Líquidos (ALPS) retira del agua usada para enfriar los maltrechos reactores de Fukushima 62 tipos de materiales radiactivos a excepción del tritio. Mediante el ALPS, TEPCO cree que limpiará para marzo de 2015 todo este agua que se almacena en más de 1.000 contenedores que hay repartidos por las instalaciones de Fukushima.
El año pasado varios de estos tanques dejaron escapar agua altamente contaminada que llegó al mar, por lo que la empresa eléctrica considera el muy importante el poder descontaminar el agua en el plazo marcado para evitar así que se repitan episodios similares. El accidente provocado por el terremoto y tsunami del 11 de marzo de 2011 en la central de Fukushima degeneró en el peor desastre nuclear desde el de Chernóbil (Ucrania) en 1986.
Las emisiones radiactivas resultantes mantienen desplazadas a unas 52.000 personas que vivían cerca de la planta y afectaron la agricultura, la ganadería y la pesca local. Además, se está generando una psicosis en la coste este americana desde Alaska hasta Baja California por la inusual mortandad de aves y el extraño comportamiento de los animales, que muchos analistas adjudican a la llegada de las sustancias contaminantes filtradas por la planta nuclear de TEPCO.