Hamas y Al Fatah acordaron la formación de un gobierno de unidad en Gaza y Cisjordania
Las facciones rivales palestinas acordaron hoy "promover cualquier decisión que ayude al gobierno de unidad palestino".
Las facciones rivales palestinas Al Fatah y Hamas acordaron hoy que la Autoridad Nacional Palestina encabezada por el presidente Mahmud Abbas asumirá el control de Gaza, según informaron negociadores de ambos lados en El Cairo.
Musa Abu Marzouk y Azzam Ahmed, negociadores de Hamas y Al Fatah respectivamente, dijeron en una conferencia de prensa conjunta en El Cairo, donde se llevaban a cabo conversaciones mediadas por Egipto, que ambos grupos palestinos acordaron "promover cualquier decisión que ayude al gobierno de unidad palestino".
También pactaron la conformación de "una comisión mixta para supervisar el acuerdo y pronunciarse sobre cualquier desacuerdo", según informó el periódico israelí Haaretz en su edición digital.
El pacto, uno de los requisitos incluidos en el acuerdo de paz logrado con Israel que puso fin en agosto a la operación militar "Filo Protector", incluye el consentimiento de Hamas para un estado palestino dentro de las fronteras de 1967, según informó el negociador palestino Hassin Alsheikh, citado por la agencia palestina de noticias Ma'an.
Si bien aún no trascendieron precisiones sobre los términos del mismo, los negociadores señalaron a los periodistas que éste contempla la unificación de las instituciones de seguridad y civiles y la supervisión por parte del Gobierno de unidad nacional de la reconstrucción de Gaza, tras la última ofensiva que acabó con la vida de más de 2.100 palestinos y 70 israelíes y destruyó decenas de escuelas, hospitales y mezquitas.
El acuerdo global alcanzado supone que la Autoridad Nacional Palestina (ANP) controle los pasos fronterizos, incluidos los de la Franja, la asociación política en la toma de decisiones, la vuelta del Parlamento palestino a ejercer sus funciones y "la coordinación de la actuación de la ANP a nivel internacional, sobre todo en la adhesión palestina a las instituciones de la ONU" de manera permanente, señaló Ahmed.
El alto el fuego en Gaza alcanzado en agosto contemplaba como condición que la ANP encabezada por Abbas, debe hacerse cargo de la administración civil en Gaza de Hamas, pero una disputa por la falta de pago -por parte de la ANP- de los salarios a los trabajadores del sector público de Gaza, trajo tensiones entre las dos principales facciones palestinas al punto casi de ruptura.
Sobre este punto, Ahmed enfatizó que "todos los funcionarios serán pagados por el gobierno de unidad porque son todos los palestinos y este es el gobierno de todos los palestinos".
Marzouk, en tanto, que además es el presidente de la conducción de Hamas, dijo que el control de los cruces fronterizos en Gaza, otro tema controvertido, quedaría en manos de Naciones Unidas junto con el Gobierno de unidad.
"Naciones Unidas llegará a un acuerdo con Israel y con el Gobierno de unidad sobre cómo manejar los cruces", dijo y aclaró que el cruce de Rafah (que une la Gaza con Egipto) "no es parte de las negociaciones".
El momento del anuncio del acuerdo no es accidental, y servirá de trasfondo a los intereses de Abbas, quien tiene previsto dirigirse mañana a la Asamblea General de la ONU y presentar un plan diplomático para poner fin a la ocupación israelí en los próximos tres años y el establecimiento de un estado palestino dentro de las fronteras de 1967.
Los enclaves palestinos, distantes 47 kilómetros uno de otro, se separaron de hecho tras una breve guerra civil en 2007, cuando los islamistas se hicieron con el control de la Franja de Gaza tras expulsar a las fuerzas leales al presidente Abbas, lo que originó dos Gobiernos palestinos: uno de Hamas en Gaza y otro de la ANP en Cisjordania.
Desde el acuerdo de unidad alcanzado en abril, la reconciliación palestina chocó con varios problemas financieros, además de la frontal oposición de Israel, cuyo primer ministro Benjamin Netanyahu acusó a Abbas de "pactar con terroristas que buscan la destrucción de Israel".
La reciente operación militar israelí debilitó militarmente a Hamas, que ya mostraba signos de decaimiento desde que perdió el apoyo de la Hermandad Musulmana de Egipto, pero las bajas infligidas por sus milicianos al Ejército israelí -abrumadoramente superior- dispararon la popularidad de la organización islamista, considerada terrorista por la Unión Europea y por Estados Unidos.