La Argentina sumó el respaldo de Estados Unidos en el juicio con los acreedores
La Corte de Apelaciones de Nueva York aceptó ayer un pedido del gobierno de Barack Obama para presentar un "amicus curiae" en apoyo al pedido argentino para un recurso de revisión de la sentencia del pasado 26 de octubre
Se trata de una "revisión en banc", un recurso que se utiliza muy pocas veces, y que constituye una reconsideración de una sentencia de la Corte de Apelaciones por el plenario de la Cámara, que se reúne 13 veces al año.
El pedido es para que dicha Corte revise el fallo completo que consideró que la Argentina violó el principio de tratamiento igualitario para los acreedores. En caso de prosperar el pedido, podría dejarse de lado el juicio que enfrenta la Argentina contra los denominados "fondos buitre". El próximo 27 de febrero, en Manhattan, habrá una audiencia clave.
La presentación del gobierno de a favor de la Argentina fue realizada el pasado 28 de diciembre resultó un apoyo inédito para el país, ya que fue presentado por tres dependencias estadounidenses: los departamentos del Tesoro, de Estado, y de Justicia.
El documento planteó como "una cuestión de importancia excepcional" para el gobierno de Estados Unidos, que la Corte efectúe una revisión total de dicho fallo del 26 de octubre, y en particular de la interpretación de que Argentina violó la cláusula de tratamiento igualitario a los acreedores.
Para la administración de Obama, "la interpretación del pari passu es incorrecta y adversa a los Estados Unidos" y?"la sentencia (de Griesa, que obliga a pagar los demandantes NML Capital y Aurelius con fondos destinados al pago del canje) contraviene las leyes de Estados Unidos de inmunidad soberana, FSIA (por sus siglas en inglés), y podría dañar las relaciones exteriores de los Estados Unidos".
"Al restringir -la Corte- indebidamente la inmunidad otorgada a la propiedad del Estado extranjero, la decisión no sólo contradice el precedente judicial de dicho Tribunal, sino que podría afectar adversamente a las relaciones del gobierno de EE.UU. y amenazar los activos del gobierno de Estados Unidos", sostiene el texto oficial.