La nueva sentencia de la Corte Suprema de los Estados Unidos amplía los derechos de portación de armas en medio de un feroz debate nacional sobre el tema, dado que anuló una ley de Nueva York que restringía los derechos de portación de armas.

Alrededor de una cuarta parte de los estadounidenses vive en estados que podrían verse afectados si se cuestionan sus propias reglas.