Obama declara a Venezuela una "amenaza extraordinaria a la seguridad nacional de EE.UU."
El presidente ordenó nuevas sanciones para el gobierno de Maduro, que incluyen la suspensión de visas. Hablamos con Santiago Cantón, ex secretario general de la CIDH
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama , emitió hoy una orden ejecutiva en la que declara la situación en Venezuela como una "amenaza inusual y extraordinaria a la seguridad nacional y política exterior de Estados Unidos" y, como consecuencia, ordenó nuevas sanciones que afectan al gobierno de Nicolás Maduro , según un comunicado de la Casa Blanca.
La acción ejecutiva ordena la suspensión de visas y la congelación de bienes en territorio estadounidense de siete funcionarios militares y policiales venezolanos.
"Estamos comprometidos a hacer avanzar el respeto por los derechos humanos, a proteger las instituciones democráticas, y a proteger el sistema financiero de Estados Unidos de los flujos financieros ilícitos de la corrupción pública en Venezuela", dice el comunicado.
Los blancos de las nuevas sanciones de Estados Unidos son "personas involucradas en o responsables por la erosión de las garantías de los derechos humanos, la persecución de oponentes políticos, la restricción de la libertad de prensa, el uso de la violencia y violaciones a los derechos humanos y abusos en respuesta a las protestas contra el gobierno, y las detenciones y arrestos arbitrarios de manifestantes antigubernamentales, así como la corrupción pública significativa de altos funcionarios del gobierno de Venezuela".
Los funcionarios sancionados son el Comandante de la Región Estratégica de Defensa Integral Central (REDI Central) Antonio Benavides Torres; el director de la policía política SEBIN Gustavo González López; el presidente de la Corporación Venezolana de Guayana y ex comandante de la Guardia Nacional Justo Noguera Pietri y la fiscal 20 del Ministerio Público Katherine Haringhton.
La lista de sancionados la completan el director de la Policía Nacional Bolivariana Manuel Pérez Urdaneta, el comandante de la 31 brigada armada del Ejército Manuel Bernal Martínez y el Inspector General de las Fuerzas Armadas Miguel Vivas Landino.
La Casa Blanca responsabiliza a estos funcionarios de violar los derechos humanos al reprimir las protestas callejeras que dejaron 43 muertes el año pasado.
A la fiscal Haringhton le señala haber formulado cargos criminales a líderes de la oposición usando correos electrónicos fraudulentos.
"Funcionarios de Venezuela que ahora y antes han violado los derechos humanos de ciudadanos venezolanos y se han involucrado en actos de corrupción no serán bienvenidos acá, y ahora tenemos herramientas para bloquear sus activos y el uso que hacen del sistema financiero de Estados Unidos", dijo en una declaración el vocero de la Casa Blanca Josh Earnest.
"Estamos profundamente preocupados por los esfuerzos del Gobierno venezolano para aumentar la intimidación sobre los adversarios políticos. Los problemas de Venezuela no pueden resolverse criminalizando a los disidentes", agregó.
El Congreso de Estados Unidos ya había aprobado el pasado 10 de diciembre esas sanciones, que el presidente Obama ratificó el 18 de diciembre. Hoy la Casa Blanca identificó a los afectados.
Estados Unidos y Venezuela no intercambian embajadores desde 2010.